En ocasiones las consecuencias de una madre con problemas mentales van mucho más allá de la educación que pueda ofrecer a sus hijos.

Diada Madre-Hijo

Algunos autores han definido a la especie humana como ella que es más defensa durante mayor que en todos los veces cuando nacen precisan del cuidado y la atención de sus semejantes, incluso de su protección ante los depredadores de otras especies, o incluso de sus congéneres. Pero si bien este es un proceso natural, como en todos los animales, en la especie humana se ve alargado del tiempo, más allá que en otras especies.
Así a las pocas horas, días, o semanas las crías ya pueden caminar, saltar o nadar libremente, pero los seres humanos tenemos que estar continuamente auxiliados hasta que consigamos un desarrollo neuromotor y cognitivo suficientemente habilidoso para poder emprender nuestro camino de independencia.
En estas primeras etapas del otro, los miembros de la comunidad o los progenitores, van a ser los que tienen cuidado y alimento a los bebés.
Tarea que en muchas culturas ha sido encargada a la madre del bebé, la cual desempeñará durante años esta labor formándose un vínculo muy importante tanto a nivel colectivo como emocional denominado díada madre-hijo, pero ¿Qué efectos conlleva una madre con problemas mentales?

Madre en Novedades en Psicología

Salud Mental Madre

Esto es lo que precisamente se ha tratado de averiguar desde la Universidad de Maryland (Estados Unidos), cuyos resultados acaban de ser publicados en la revista científica Psychology.
En el estudio participaron 113 madres 29 los 54 años, que asistían con regularidad para recibir terapia psicológica en el propio centro de investigación, e igual número de sus hijos en la edad de la adolescencia, enter los 12 a 18 años.
Se realizaron tres evaluaciones; dos a la madre, la primera, la medida con respecto a la presencia de traumas psicológicos, evaluado a través del cuestionario estandarizado denominado Trauma Symptom Inventory (TSI); y la segunda evolución hacia referencia al estilo parental empleado en la educación y relación con sus hijos, a través de el cuestionario estandarizado denominado Parenting Practices Questionnaire (PPQ).
Con respecto a los adolescentes se valoró la presencia de síntomas depresivos, empleando para ello el cuestionario estandarizado Beck Depression Inventory (BDI).
El análisis de comparar los resultados de las pruebas anteriores entre la presencia de traumas en la madre y su estilo parental, frente a la presencia de síntomas depresivos en los adolescentes, dio como consecuencia que madres con alta calificaciones en traumas y estilos estrictos parentales, que se correlaciones significativamente con una mayor presencia de síntomas depresivos entre los adolescentes; y al contrario, bajos niveles de traumas en las madres, y un estilo parental más flexible correlaciona con una menor presencia de sintomatología asociada a la depresion en adolescentes.

5UIaoDYiFGg https://youtu.be/5UIaoDYiFGg

Madre y Adolescencia

Una de las ventajas con respecto a este estudio, es que busca las implicaciones de la diada madre-hijo, más allá de los primeros meses e incluso años de vida, al analizar y participar en la investigación los hijos adolescentes de estas madres.
En las limitaciones del estudio, se encuentra que se trata de una población muy específica, por la reacción en otras localidades para probar si sus efectos se mantienen.
Igualmente al limitar la investigación a la relación madre-hijo, está obviando los posibles efectos que tiene la figura paterna tanto en interferir o facilitar dicha relación, por lo que se precisarían de incorporar este mismo análisis la pareja para comprobar sus consecuencias.