Categoría: Blog de Articulos con Novedades de Psicologia
En esta sección de Novedades en Psicología escria por el Dr. Juan Moisés de la Serna, se incluyen los distintos artículos sobre las diversas temáticas de Psicología y Neurociencias más actuales y destacados en dichas areas.
Uno de los principales problemas de la tercera edad es saber si debe o no continuar conduciendo.
Conducir en la ancianidad
A pesar de que existen exámenes periódicos, estos únicamente se centran en la capacidad de atención y de memoria.
Y eso que a medida que envejecemos, se van deteriorando todas nuestras habilidades, incluidas las anteriores.
Son muchos los que con la edad empiezan a usar gafas, quizás es el signo más evidente de que la «vista no es lo que era», pero igualmente sucede con la atención, los reflejos y la memoria.
Es cierto, que cuando se produce un cambio en en código de circulación se tarde un tiempo en aprender las nuevas señales, pero cuando empieza a fallar la memoria, se va dejando de saber a qué corresponden las que se conocían.
Igualmente los reflejos decaen, por lo que si hay que afrontar alguna situación de emergencia, como una frenada brusca o esquivar un objeto en medio de la carretera, esto se verá seriamente dificultado.
Aún y con todo lo anterior tenemos conductores de setenta u ochenta años, que se creen totalmente capaces de realizar una conducción como cuando eran veinteañeros.
Es cierto que conducir confiere cierto grado de libertad de desplazamiento, pero también, que algunos ven perder su conducción de conductor como una señal de «derrota por la vejez», pero ¿Hasta que edad es adecuado conducir?
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Conducir con Alzheimer
En un reciente informe realizado desde la Alzheimer’s Australia NSW (Australia) se analiza la relación entre la conducción y las demencias, y en concreto la enfermedad de Alzheimer.
Entre las características de la conducción de las personas con Alzheimer esta: una conducción acelerada, con problemas para recodar las zonas familiares, sin respetar la distancia de seguridad, con dificultades para mantenerse dentro de su carril y con escasa capacidad de atención sostenida.
El informe señala que no existen normativa legislativa al respecto, por lo que cualquier paciente con demencia puede conducir siempre y cuando supere las pruebas estandarizadas al respecto, con el peligro que ello conlleva para sí mismo y para los demás.
A pesar de no poder actuar legalmente al respecto, el informe indica de la necesidad de crear vías alternativas de movilidad para estas personas, de forma que le sea más fácil ir en autobús o en tren a los sitios, en vez de optar por usar su propio vehículo.
Hay que tener en cuenta la realidad del tema, tomándolo en su conjunto, ya que cuando hablamos de demencia o de pacientes con enfermedad de Alzheimer, lo solemos hacer con personas que han recibido un diagnóstico al respecto, y que normalmente se corresponde con una fase avanzada de la enfermedad.
Pero la enfermedad de Alzheimer tiene una fase silenciosa, en donde poco a poco se van agravando los síntomas hasta que son evidentes, en dicha fase, se van teniendo conatos de pérdida de memoria, atención, labilidad emocional,… y todo es puede ir en detrimento de la calidad de la conducción mucho antes de obtenerse el diagnóstico oportuno.
Hay estudios que señalan que uno de cada dos personas mayores de ochenta años padecen algún tipo de demencia, por lo que lo más lógico sería poner ese límite como máximo de vigencia del carnet de conducir, evitando así las consecuencias negativas asociadas.
Igualmente señalar que a partir de los sesenta años es cuando empiezan a darse los primeros síntomas evidentes de demencia incluido la enfermedad de Alzheimer, por lo que debería ser exigible que cualquier persona que supere esa edad se realizase las pruebas de conducir acompañado de una prueba neuropsicológica específica al respecto.
Muchos han sido los estudios realizados tratando de comprender los factores que afectan al Alzheimer.
Factores en la enfermedad de Alzheimer
Estos estudios se han centrado tanto para la prevención como para la posible cura de la enfermedad.
Todo ello con la idea de reducir la tasa de incidencia de la enfermad, la cual es neurodegenerativa, es decir va avanzando con la edad.
Aún si no existiese ningún factor implicado, la propia enfermedad, con el tiempo va a tener un efecto devastador en las funciones cognitivas y motoras.
Pero en algunos casos, este proceso se ve acelerado, y lo que para otros puede durar décadas, para determinados pacientes es cuestión de años.
Existen muchos índices que se manejan actualmente, de los cuales el genético es el que mayor peso juega en determinados tipos de la enfermedad de Alzheimer.
Entre los candidatos psicológicos más frecuentes, está el de la ansiedad y la depresión, basado en que en sujetos normales, altos niveles de ansiedad y depresión reducen la calidad de vida de los mismos pero ¿Qué papel juega la ansiedad en el avance del Alzheimer?
Vídeo Recomendado: El ojo clínico Demencia Alzheimer (Programa Completo)
Ansiedad en la enfermedad de Alzheimer
Esto es precisamente lo que se ha tratado de averiguar con una investigación realizada desde el Department of Research and Innovation, el Age Department, Clinic of Psychiatry y el Neurological Department, Clinic of Medicine, Helse-Fonna HF Haugesund Hospital; la Faculty of Medicine y el Department of Clinical Psychology, University of Bergen; Olaviken Psychogeriatric Hospital; el Centre for Clinical Research in Psychosis, con el Centre for Age-Related Medicine, y el Research Department, Stavanger University Hospital; el Department of Mathematics and Natural Sciences, University of Stavanger y la Network for Medical Sciences, University of Stavanger (Noruega) junto con la Division of Neurogeriatrics, Department of Neurobiology, Care Sciences and Society, Centre for Alzheimer Research, Karolinska Institutet (Suiza) cuyos resultados acaban de ser publicados en la revista científica Alzheimer’s Research & Therapy.
En el estudio participaron ciento veintidos pacientes con la enfermedad de Alzheimer y setenta y dos con la demencia de los Cuerpos de Lewy.
A todos ellos se les administró un cuestionario estandarizado para detectar síntomas ansiosos a través del Neuropsychiatric Inventory y el Montgomery–Åsberg Depression Rating Scale
Igualmente se evaluó el desempeño cognitivo a través del Clinical Dementia Rating (CDR).
Este registro se realizó con un seguimiento de cuatro años para comprobar si existe relación en función de la evolución de la enfermedad.
Los resultados muestran una evolución desigual del nivel de ansiedad en función del tipo de demencia sufrido, así los pacientes con la demencia de cuerpos de Lewy tienen mayor nivel de ansiedad de partida que se va reduciendo con el tiempo; al contrario que la enfermedad de Alzheimer, donde la evolución del nivel de ansiedad va paulatinamente aumentando con la progresión de la enfermedad.
A pesar de los datos anteriores, los resultados no muestran diferencias significativas en la interacción de la evolución de la enfermedad y el nivel de ansiedad, esto es, la enfermedad va a evolucionar de la misma manera, tenga o no el paciente sintomatología ansiosa.
Entre las limitaciones del estudio comentar que se ha centrado en la ansiedad, dejando de lado la sintomatología depresiva y el papel que puede jugar en la evolución de las demencias.
Igualmente, y tal y como señalan los autores, los resultados del estudio contradicen buena parte de la tradición con respecto a los efectos del estrés sobre la salud, por lo que es preciso de nuevos estudios que expliquen porqué en este caso no se obtienen estos resultados esperables.
Por último señalar que el estudio constata diferencias significativas en los niveles de ansiedad iniciales pero no tarta de dar una explicación al respecto.
A pesar de las limitaciones anteriores, parece concluyente que la ansiedad, a diferencia de lo esperado, no parece ser determinante para la evolución de la enfermedad de Alzheimer
Entrevista a la Especialista Valeria Moletto quien nos habla sobre la estimulación hormonal y la utilización de espacios verdes como estrategia terapéutica en el abordaje temprano.
¿Qué es la Epigenética?
Hasta hace poco tiempo se creía que los seres humanos estaban condicionados fundamentalmente por su carga genética, esta concepción se ve modificada a partir de la Epigenética y la ciencia avanza para lograr descifrar el lenguaje que codifica pequeñas modificaciones químicas capaces de regular la expresión de multitud de genes.
Se está descifrando un nuevo lenguaje del genoma e introduciendo la noción de que nuestras propias experiencias pueden marcar nuestro material genético de una forma hasta ahora desconocida, y que estas marcas pueden ser transmitidas a generaciones futuras.
¿Cuál es la relación entre la Epigenética y las emociones?
La Epigenética ha demostrado que los estados emocionales de las personas movilizan centros hormonales, centros moleculares de la emoción, que interactúan con la membrana de la célula, tienen acceso al material genético y hace que unos genes queden desactivados y otros se activen.
Las experiencias positivas activan ciertas hormonas:
– Oxitocina: Si bien se sabe que esta hormona interviene en el proceso de parto, lactancia y en los procesos sexuales, este neurotransmisor, a nivel cerebral disminuye la actividad del sistema nervioso simpático y del eje hipotalámico-hipofisario-suprarrenal, lo que aumenta los niveles endógenos de opiáceos e induce efectos anti-estrés, como: baja tensión arterial, ritmo cardiaco y hormonas del estrés, bienestar y relajación, además de una óptima termorregulación.
Es considerada también un gran mediador y controlador de las emociones y comportamientos sociales como el amor, la memoria, la rabia, la agresión y el establecimiento de correlaciones entre experiencias pasadas y presentes, promueve un aumento del umbral del dolor y un descenso de los niveles de ansiedad, disminuye el miedo e incrementa la confianza, la empatía y la generosidad.
Vídeo Recomendado: EPIGENÉTICA LA NUEVA REVOLUCIÓN BIOLÓGICA
¿Cual es la relación entre la oxitocina y el comportamiento social?
Por tanto bajo los efectos de la oxitocina sentimos bienestar, estamos más tranquilos y con una mayor y mejor predisposición ante los demás. Puede decirse que su misión es facilitar la propagación de la especie.
La oxitocina está implicada en comportamientos sociales como la memoria social, la formación de vínculos, el apego, la empatía y el comportamiento maternal y paternal.
Los niveles de oxitocina son más altos en las hembras que en los machos de cada especie y en ellos provoca conductas agresivas y de competición.
¿Qué condiciones son necesarias para que se libere la oxitocina?
La oxitocina es la hormona del amor, de la calma y el contacto, sólo se libera cuando se dan estas condiciones.
Por el contrario es inhibida por la adrenalina, una hormona que liberamos los mamíferos en situaciones de emergencia: cuando tenemos frío, miedo o nos sentimos en peligro.
Los niveles de la oxitocina dependen a su vez de otras hormonas e influyen así mismo en la producción de otras como los estrógenos, la dopamina, serotonina, prolactina y endorfinas.
-La prolactina por ejemplo está directamente implicada en los cuidados maternales/paternales hacia las crías y tiene un efecto relajante.
-La dopamina es la encargada del sistema de recompensa, que hace que tendamos a repetir los comportamientos que maximizan recompensas.
– Las endorfinas por su parte son analgésicos naturales que nos proporcionan bienestar. De manera que una persona con altos niveles de oxitocina se sentirá más feliz.
– Tomando las palabras de la Dr Ananya Mandal, La Serotonina es un regulador del humor, la Activación de un formulario de receptor de la serotonina en el cerebro llamado el receptor 5-HT1A se ha mostrado para prevenir la agresión. Dentro de los intestinos, la serotonina regula el movimiento intestinal.
En el cerebro, la serotonina está implicada en la regulación de varias funciones importantes incluyendo el sueño y apetito. Los niveles Anormales de la serotonina también se asocian a problemas tales como desorden obsesivo y trastornos de ansiedad.
¿Qué consecuencias hormonales tienen las emociones negativas?
Las experiencias negativas o traumáticas activan otras hormonas como ser el Cortisol.
Citando a Almudena Reguero Saá, titulada en nutrición y dietética, en su artículo “El Cortisol, la hormona del estrés” quien plantea que en situaciones normales las células de nuestro cuerpo utilizan el 90% de la energía en actividades metabólicas tales como reparación, renovación y formación de nuevos tejidos. Pero cuando se produce una situación de alarma y estrés nuestro cerebro envía un mensaje a las glándulas adrenales para que liberen cortisol, esta hormona hace que el organismo libere glucosa a la sangre para enviar cantidades masivas de energía a los músculos.
De esta forma todas las funciones anabólicas de recuperación, renovación y creación de tejidos se paralizan y el organismo cambia a metabolismo catabólico para resolver esa situación de alarma.
Cuando la situación de estrés es puntual, una vez superada la emergencia los niveles hormonales y los procesos fisiológicos vuelven a la normalidad, pero cuando el estrés es prolongado, se disparan en el organismo los niveles de cortisol, y al ser el único proveedor de glucosa del cerebro tratará de conseguirla por diferentes vías, bien sea destruyendo tejidos, proteínas musculares, ácidos grasos y cerrando la entrada de glucosa a los otros tejidos.
Los primeros síntomas de niveles elevados de cortisol son:
Cambios del comportamiento
• Falta de sentido del humor.
• Irritabilidad constante.
• Sentimientos de ira.
• Ganas de llorar.
Síntomas físicos
• Cansancio permanente aunque no hagamos nada.
• Dolores de cabeza.
• Palpitaciones.
• Hipertensión.
• Falta de apetito o gula desmesurada.
• Problemas digestivos.
• Orina frecuente, diarrea o estreñimiento.
• Dolores o calambres musculares.
• Infertilidad e interrupción de la menstruación.
• Pérdida de memoria debido a que los niveles altos de cortisol daña la conexión entre células cerebrales.
• Disminución de las defensas.
Los niveles hormonales de cada individuo generaran el modo en que este se predisponga y actúe frente a ciertos desafíos o situaciones que deberá enfrentar a lo largo de su vida.
¿Cuáles son los beneficios de la intervención temprana?
El hecho de realizar intervenciones tempranas en la vida de niños que presentan desvíos en su desarrollo, ya sea por una causa orgánica u emocional que lo justifique, nos coloca en un lugar de suprema responsabilidad, ya que al momento de evaluar debemos comprender que está ocurriendo a nivel de su sistema neuropostural y sensorial, pero con absoluta atención a sus procesos emocionales y consecuentemente sociales y hacer una proyección sobre aquellas situaciones que podrían presentarse en su cotidianidad para generar estrategias de acción y fomentar aquellas que mejoren su calidad de vida.
Cuando apelamos al concepto de plasticidad cerebral, apelamos a la capacidad que tiene el cerebro de generar conexiones de neuronas nuevas y la capacidad de generar nuevas neuronas a partir de las células madres.
En aquellos casos en que se produce un traumatismo ya sea físico o emocional, frente a la aparición de secuelas orgánicas u emocionales, se hace evidente la necesidad de intervenir tempranamente apelando a este concepto.
Los trastornos del neurodesarrollo son variados y si bien se sabe que en la mayoría hay una causa orgánica de base que los justifique, hoy con el avance de la epigenética se sabe que los impactos emocionales vivenciados, que han ingresado por diferentes vías emocionales dejan surcos a nivel central y estos dejan huellas en los genes, lo cual se transmitirá a otras generaciones.
¿Cuál es el objetivo de la intervención temprana?
El objetivo de la intervención temprana es guiar el desarrollo de una manera armónica, y poder utilizar o estimular de cierta manera aquellas hormonas que favorecen a ese proceso es una estrategia terapéutica.
Activar genes relacionados con los neurotransmisores de la inteligencia y de los estados positivos. Dormir oncogenes. El cerebro puede cambiar porque existe la neuroplastividad la cual tiene dos facetas:
• La conexión de neuronas nuevas.
• La generación de nuevas neuronas a partir de células madre.
Estás nuevas neuronas de la memoria y el aprendizaje tienen conexiones con la corteza cerebral, ósea que estamos reinventándo nuestro cerebro.
Entendiendo que frente a un desvío en el desarrollo se sugiere de manera criteriosa que tratamientos deberían llevarse a cabo, en general los mismos se implementan en centros especializados.
¿Qué dificultades surgen en la intervención temprana?
Sin embargo a la hora de evaluar el impacto emocional que esto trae aparejado en las criaturas sus niveles hormonales podrían ser los mejores indicadores. El simple hecho de asistir a una consulta clínica predispone un estado de alarma en los niños que se manifiesta claramente en su conducta. Las entradas sensoriales se asocian con áreas específicas de la corteza que activan el estado de alerta, que preparan al organismo para la huida.
Vídeo Recomendado: Intervención Temprana: Estimulación y Educación Temprana
¿Cómo facilitar la intervención temprana?
Llevar a cabo tratamientos en espacios verdes o en plazas abre la posibilidad de estimular hormonas que impactan directamente en la constitución del sistema nerviosos, por lo tanto intervenimos directamente en el desvío y apelamos a que el proceso de plasticidad se produzca en estados emocionales positivos.
También el hecho de estar en ambientes verdes abre la posibilidad a oxigenar mejor ese sistema. Que las entradas sensoriales visuales sean armónicas con la naturaleza. Que el juego elegido por el niño y dirigido por el especialista sea el instrumento que facilite la organización de ese sistema nervioso.
¿Qué beneficios conlleva el sol?
El Sol es la base de la energía vital y aporta a la salud, entre otros beneficios, los siguientes:
1. Huesos: La vitamina D es fundamental para la mineralización de los huesos y de los dientes. Los potentes rayos del sol se encargan de activarla.
2. Piel: La radiación solar ayuda a prevenir y a manejar el acné, y, en casos severos como la psoriasis, los rayos solares son determinantes para ayudar a remitir la enfermedad.
3. Defensas: El sol puede aumentar el número de glóbulos blancos en sus dos líneas, neutrófilos y linfocitos; estos conforman el primer escuadrón de defensa del organismo.
4. Grasas: Los niveles de colesterol se reducen en las personas durante los veranos; la luz solar es fundamental para metabolizarlo. Además, la gente hace más ejercicio cuando el día es luminoso.
5. Presión arterial: Cuando se dilatan las arterias de la piel se reduce la cantidad de sangre concentrada en los órganos. Esto baja la presión arterial.
6. Corazón: El corazón se contrae por acción del calcio; cuando es insuficiente, las hormonas paratiroideas lo toman de los huesos para dárselo. Pero cuando una persona se asolea se disminuyen los niveles de estas hormonas.
7. Somnolencia: Los rayos ultravioleta regulan la producción de melatonina, hormona que ayuda a definir los ciclos de sueño. La luz solar reduce sus niveles, lo que ayuda a sentirse más despierto.
8. Estado de ánimo: La radiación del sol promueve la síntesis de la serotonina, una sustancia relacionada con el bienestar y que también ayuda a regular el sueño.
— Culturas Indómitas (@canalcultural) 29 de noviembre de 2016
¿Qué beneficios acarrea la intervención en espacios abiertos?
Llevar a cabo las intervenciones en espacios lúdicos y abiertos ayuda a los padres a participar desde otro lugar. A comprender que estrategias de intervención se pueden implementar frente a un hábito neuropostural, sensorial o emocional inadecuado.
Los niños deben jugar para desarrollarse y nosotros como adultos y especialistas buscar las estrategias de acción que favorezcan a su desarrollo dentro de un ambiente y clima adecuado a sus necesidades.
Muchas veces nos encontramos con niños que presentan dificultades en la comunicación y conductas impulsivas, con diferentes diagnósticos y niveles de compromiso, lo cual hace difícil comprender que les ocurre y de qué manera podemos asistirlos. Muchas veces las emociones los desbordan y observamos ante la dificultad de comunicar su emocionalidad, conductas impulsivas.
Sabemos que la zona anterior izquierda del cerebro, la zona prefrontal izquierda es la base de las emociones positivas. Entonces cuando una emoción nos está desbordando, si comienza a articularse en el lenguaje, a la fuerza tiene que pasar por la zona prefrontal izquierda. En aquellos niños que presentan una dificultad para comunicar los asistimos poniendo la palabra, apelando a la zona pre frontal izquierda; y abrimos la posibilidad de que intervenga el sistema neuropostural mediante el ejercicio físico y el juego para acelerar el corazón y la respiración, para activar la oxitocina y la betaendorfina, ambas hormonas tienen la capacidad de desactivar la amígdala y son la amígdala y el hipotálamo la base de las reacciones de ira.
Comprender lo que ocurre en los sistemas hormonales, neuroposturales, sensoriales, emocionales y sociales de una criatura nos permitirá favorecer y habilitar su desarrollo buscando las mejores estrategias.
Utilizar el ambiente estratégicamente para estimular un desarrollo óptimo es el desafío al que nos enfrentamos para asegurar calidad de vida a nuestros niños!
Bibliografía sobre la Epigenética
• Kaminker, P. 2007. Epigenetics: the science of heritable biological adaptation Arch Argent Pediatr. 105(6): 529-531.
• Jaenisch R, Bird A. 2003. Epigenetic regulation of gene expression: how the genome integrates intrinsic and environmental signals. 33:245-54.
• Jirtle R. & Skinner,M. 2007Environmental epigenomics and disease susceptibility. Nat Rev Genet 2007; 8(4):253-62.
• Godfrey, K., Lillycrop, K., Burdge, G., Gluckman, P. & Hanson M. 2007. Epigenetic mechanisms and the mismatch concept of the developmental origins of health and disease. Pediatr Res. 61:5R-10R.
• Ting, A., McGarvey, K. & Baylin, S. 2006. The cancer epigenome components and functional correlates. Genes Dev. 20(23):3215-31.
• O’Driscoll, L. 2006. The emerging world of microRNAs. Anticancer Res. 26(6):4271-8.
• De Baun, M., Niemitz, E. & Feinberg, A. P. 2003. Association of in vitro fertilization with Beckwith–Wiedemann syndrome and epigenetic alterations of LIT1 and H19. Am. J. Hum. Genet. 72: 156-160.
• Rivenbark, A. G. & Coleman, W. B. 2007. The Use of Epigenetic Biomarkers for Preclinical Detection of Hepatocellular Carcinoma: Potential for Noninvasive Screening of High-Risk Populations. Clinical Cancer Research. 13: 2309-2312.
• Grabher, C., Von Boehmer, H. & Look, A. 2006. Notch 1 activation in the molecular pathogenesis of T-cell acute lymphoblastic leukaemia. Nat Rev Cancer. 6:347–59.
Desde aquí mi agradecimiento a Dª Valeria Moletto, Especialista en Intervención Temprana, Seguimiento Prematuros de Alto Riesgo Servicio de Neonatología Hospital Evita Pueblo, por habernos acercado a esta innovadora intervención de espacios verdes como estrategia terapéutica.
Seguro que habrás oído que los pequeños tienen mayores facilidades para el estudio.
Educación de Adultos
Tanto los más pequeños como los jóvenes parecen unos privilegiados para adquirir cualquier nuevo conocimiento.
Apenas les cuesta empezar un nuevo idioma o estudiar trigonometría.
Algo que hasta hace unos años la ciencia tenía vetado a las personas mayores, diciendo que estas no están preparadas para este nuevo conocimiento.
El descubrimiento de la regeneración neuronal y de la creación de nuevas conexiones entre ellas incluso a edades avanzadas puso en tela de juicio dichas afirmaciones, defendiendo la postura que todo el mundo, a cualquier edad puede aprender lo que quiera, ya que el cerebro está preparado para ello.
Algo que obligó cambiar los marcos teóricos existentes, que por un lado constataban la dificultad de las personas mayores y por otro tenían las herramientas listas para el aprendizaje.
Una de las teorías que surgió para explicar esta contradicción fue con respecto a que los pequeños y jóvenes tienen motivación y tiempo para ello, prácticamente es lo único que hacen, estudiar, comer y jugar.
En cambio los adultos, están demasiado ocupados para poder sacar unas pocas horas a la semana para estudiar un segundo idioma, y de semana a semana se le olvida lo aprendido.
Una explicación que parecía que satisfacía a todos, pero ¿Se puede aprender a cualquier edad?
Vídeo Recomendado: La Educación de jóvenes y adultos en Argentina
Aprendiendo en la tercera edad
Esto es lo que se ha tratado de responder con una investigación realizada desde la Universidad de Florida (EE.UU.) cuyos resultados han sido publicados en el 2016 en la revista científica Frontiers in Aging Neuroscience.
En el estudio participaron noventa y tres adultos, de los cuales el 60% eran mujeres,con edades comprendidas entre los 43 a 85 años.
A todos ellos se les pidió que completas los test estandarizados incluídos en el NIH Toolbox, que incluía pruebas de memoria episódica, memoria de trabajo, ejecutivo central, lenguaje y atención; además del Montreal Cognitive Assessment (MoCA) que evaluaba la orientación, la atención, la memoria a corto plazo, el pensamiento abstracto, la fluidez verbal y la función ejecutiva visual.
Igualmente se registró mediante resonancia magnética un área concreto del cerebro, el hipocampo, responsable de la consolidación de las huellas de memoria.
Los resultados muestran una reducción del tamaño del hipocampo entre los mayores que obtienen peores resultados en las pruebas anteriores.
Según los autores, el decremento del hipocampo se debe al envejecimiento, por lo que a medida que pasan los años el resto de las capacidades, incluida la de adquirir nuevo conocimiento se va a ir perdiendo.
Entre las limitaciones del estudio se encuentra que no se ha realizado un seguimiento de los mayores, para comprobar si el tamaño del hipocampo puede ser índice predictivo de sufrir algún tipo de demencia, como la enfermedad de Alzheimer.
Igualmente no explica porqué unos individuos mantienen un hipocampo de tamaño normal y buenos resultados a pesar de tener edades avanzadas.
A pesar de las limitaciones anteriores, estos resultados van en contra de lo expuesto con anterioridad con respecto a que se puede aprender en cualquier momento.
Aún y con los beneficios de la regeneración neuronal, parece que si el cerebro se va deteriorando con el paso del tiempo, esto va a tener un efecto directo en la pérdida de posibilidades.
Con los resultados neuronales se puede afirmar que los mayores van a poder seguir aprendiendo, gracias a la regeneración neuronal, pero les va a costar más, debido al deterioro del hipocampo.
Algo que está de acorde con la experiencia directa de los usuarios, por lo que no hay que recurrir a teorías explicativas como la «falta de tiempo» para ello.
Muchos se ha hablado de los beneficios de ser una persona positiva, sobre todo en el ámbito social.
Pensamientos Positivos
A veces el término positivo se suele confundir con el de optimista, aunque el primero hace referencia a un tipo de pensamiento y el segundo a una característica de la personalidad.
Los pensamientos positivos son aquellos que nos hacen apreciar lo que tenemos alrededor, pensar que todo va a salir bien y que el esfuerzo se verá recompensado.
Igualmente el pensamiento positivo permite pensar que los demás van a ser congruentes y justos en sus valoraciones.
Estos pensamientos se contraponen a los negativos, donde todo es injusto, feo, inadecuado; primando sentimientos de envidia, autocrítica y falta de valoración de uno mismo.
Un tipo de pensamiento u otro van a jugar un papel fundamental en cómo nos perciben los otros y reaccionan al respecto.
Así, a las personas positivas se las suele tener en estima, mientras que a la negativa se la suele ir «marginando» y dejando de lado, pero ¿Los pensamientos positivos previenen las enfermedades?
Vídeo Recomendado: Dr. Javier García Campayo: Mindfulness y Psicología Positiva en la Semana Saludable en Aragón
Consecuencia de los pensamientos positivos
Esto es lo que ha tratado de responderse con una investigación desde el Department of Special Education, University of Thessaly (Grecia) cuyos resultados han sido publicados en la revista científica Psychology.
En el estudio participaron trescientos noventa y cinco cadetes de la academia del ejército griego, de los cuales ciento veintitrés eran mujeres, con edades comprendidas entre los 18 a 22 años.
Todos ellos rellenaron un cuestionario estandarizado para evaluar la resiliencia denominado Connors-Davidson Resilience Scale (CD-RISC); otro para evaluar los pensamientos positivos a través del Positive and Negative Affect Scale (PANAS) y la salud general a través del The General Health Questionnaire-28 (GHQ-28).
Los resultados informan de una correlación significativa entre los pensamientos positivos y la resiliencia. Esto, a mayores pensamientos positivos, la persona se siente más capaz de superar cualquier dificultad en la vida.
Igualmente se obtuvieron correlaciones significativas entre los pensamientos positivos y la salud general del participante, esto es, las personas positivas estaban más sanas que las que tenían pensamientos negativos.
Hay que tener en cuenta que el estudio se ha realizado con una población muy específica, cadetes militares, los cuales están sometidos a un nivel de exigencia y estrés muy superior al del resto de la población.
Igualmente los datos obtenidos se refieren únicamente a sus respuestas a cuestionarios, no contemplando otro tipo de recogida de datos como el observacional, el historial clínico, red social de contactos,…
A pesar de las limitaciones comentadas, parecen claros los beneficios de los pensamientos positivos.
Falta analizar si estos beneficios se mantienen en el tiempo, es decir, si los pensamientos positivos se comportan como un factor de prevención de enfermedades futuras.
El bullying o acoso escolar se ha convertido en una problemática de nuestras aulas donde cada vez hay más pequeños afectados.
El acoso escolar
De hecho en algunos países se estima que es la primera causa de estrés entre los menores en edad escolar, una situación que puede llegar hasta la adolescencia.
Aunque existen muchas teorías al respecto, sobre cómo se produce y mantiene el bullying, hoy en día se está realizando un importante esfuerzo para que los más jóvenes sean capaces de denunciar esta práctica abusiva por parte de sus compañeros.
Una situación que en muchos casos tenía que soportar el menor en silencio, y que escasamente transcendía a la familia, por temor o vergüenza, pero que hoy en día se facilita la denuncia, incluso ante los centros de estudios.
Todo para cortar cuanto antes la problemática que de no producirse puede llegar a «marcar» al menor en pleno desarrollo, pero ¿Existen nuevas formas de descubrir el bullying?
Vídeo Recomendado: Cómo prevenir el Acoso Escolar (Bullying)-Dr Iñaki Piñuel.
Detectando el acoso escolar
Esto es lo que ha tratado de averiguarse con una investigación realizada desde el Departamento de Informática, junto con el Departamento de Economía y Empresa, y el Departamento de Psicología, Universidad de Almería (España) cuyos resultdos han sido publicados en el 2016 en la revista científica Frontiers in Psychology.
En el estudio participaron ciento cincuenta y un menores con edades comprendidas entre los 8 a 16 años, de los cuales, entre el 8 al 24% eran estudiantes de origen extranjero.
A todos ellos se les entrevistó sobre sus interacciones con sus compañeros, prestando especial atención al empleo tecnológico para las mismas, para lo cual se desarrolló una App que registraba las interacciones a través del móvil.
Los resultados muestran que los alumnos realizan «vacíos» de interacciones ante determinados pequeños, ya sea por sus características raciales o de otro tipo.
Esto es, los pequeños prefieren interactuar con aquellos con los que se siente más a gusto, no conectando ni interactuando con los demás.
Esto proporciona un perfil de pequeños especialmente problemáticos, como son menores, hijos de extranjeros y en educación secundaria; los cuales son los menos «elegidos» por sus compañeros, siendo potencialmente los que más intimidación provocan y por tanto los potencialmente más dados a generar o recibir buylling de sus compañeros.
El teléfono contra el acoso escolar ha registrado 933 casos en 20 días https://t.co/pdwi7nmxGJ
A pesar de las limitaciones del estudio en cuanto al escaso número de participantes, focalizado en una población muy concreta como es la española, hay que tener en cuenta las ventajas del análisis de la actividad de los teléfonos de los menores como forma de conocer con quién sí o no se relacionan los menores.
De esta forma se puede conocer los «peor» valorados, para evitar que estos se conviertan en víctimas de bullying o al revés, que por esa sensación de exclusión se conviertan en maltratadores de sus compañeros.
Una forma innovadora, tal y como afirman los investigadores del estudio, de detectar los alumnos potencialmente relacionados con la problemática del buylling.
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