Categoría: Adolescencia psicologia o adulto joven

  • ¿Qué problemas de salud entraña Internet?

    ¿Qué problemas de salud entraña Internet?

    El uso extensivo e intensivo de las nuevas tecnologías, especialmente entre los más jóvenes a acarreado una nueva realidad la de la adicción a Internet.

    Si bien ya se tenían noticias desde hace unos años de este fenómeno, en la actualidad la adicción a Internet se ha convertido en un problema de salud mental «habitual».

    Uso de internet

    Las adicciones, sobre todo las comportamentales no parecen distinguir entre género ni edad, pudiéndose presentar en cualquier momento de la vida, aunque es durante la adolescencia donde parece que algunas se hacen más patentes.
    Quizás por que existe cierto nivel de permisividad en cuanto a la exploración de nuevas conductas, incluso las de riesgo, en lo jóvenes, algo que no es permitido a ninguna otra edad.
    Algunos defienden esta postura indicando que se trata de una forma de descubrir el mundo, pero sobre todo a uno mismo, con sus posibilidades y limitaciones.
    Pero al igual que se experimentan comportamientos adecuados, también es donde se produce la aparición de las primeras prácticas adictivas, ya sea a sustancias o comportamentales, tal y como sucede a la adicción a Internet.
    Pero si hay un colectivo especialmente sensible dentro de los jóvenes a la adicción a Internet estos son los estudiantes universitarios, sobre los cuales se está realizando multitud de investigación, aunque no está claro si es por que tenga la ciberadicción una mayor incidencia sobre ellos, o porque sea un grupo especialmente accesible para investigar, en lo que algunos han denominado investigación de campus, pero ¿Qué problemas de salud entraña Internet?



    Uso redes sociales

    Esto es precisamente lo que trata de averiguarse mediante una investigación realizada por el Department of Community Medicine, HiTech Medical College & Hospital, Pandara y el Department of Statistics, Utkal University, Vanivihar (India) cuyos resultados han sido publicados en la revista científica International Journal of Advanced Multidisciplinary Research (I.J.A.M.R.).
    En el estudio participaron 100 estudiantes elegidos al azar, de los cuales el 95% eran mujeres, con edades comprendidas entre los 17 a 23 años.
    A todos ellos se les administró un test para evaluar su nivel de adicción a Internet a través del Young’s Internet Addiction Test (I.A.T.) y otro para evaluar las implicaciones en el mundo emocional del estudiante a través del Positive and Negative Affect Schedule (P.A.N.A.S.).
    Igualmente se recogieron datos sobre el tiempo que lleva usando Internet, el propósito de su uso, los lugares que visita y el número de horas que dedica a navegar por la red.
    Los resultados muestran que el 74% del uso de Internet lo emplean para aspectos personales, mientras que únicamente un 26% lo dedican a temas relacionados con sus estudios.
    Llevando el 76% de los estudiantes entre 2 a 4 años como usuarios de Internet; mostrando el 93% un uso no intensivo de las redes, por debajo de las dos horas diarias.
    Con respecto a los lugares que visitan, el 23% lo hacen en las redes sociales, mientras que el 76% restante lo usan para explorar Internet en busca de información relacionada con sus estudios.


    Ciberadicción

    A pesar de que se trata de una amplia muestra, esta se centra exclusivamente en un tipo de carrera tecnológica, por lo que los resultados no pueden ser extensibles a otros estudiantes de carreras menos relacionadas con la tecnología.
    Igualmente a pesar de informar de que en los grupos de participantes se incluía tanto a hombres como a mujeres, no se analizan los datos por separado, luego con este estudio no es posible conocer la incidencia la adicción a Internet en relación al género.
    A pesar de haber sido evaluados, los resultados no indican el grado de estudiantes que presentan adicción a Internet, ni tampoco explican los efectos significativas positivos para el estado de ánimo que se han hallado en el uso de Internet.
    Pero si hay que destacar un dato, es que los jóvenes del estudio dedican demasiado tiempo a «asuntos propios» centrado casi en exclusiva en la redes sociales, en comparación con los que emplea para sus estudios, donde el uso de Internet es más amplio.
    Esto también debe de servir para reflexionar sobre el modelo educativo, el cual se muestra «distante» del modo en que los jóvenes se relacionan en la red, siendo necesaria la incorporación de nuevas estrategias para «explotar» las posibilidades de las redes sociales.
    Igualmente hay que cuidar del buen uso de Internet, para evitar la aparición de la adicción a Internet, debido a la dificultad tanto en su diagnóstico como en su tratamiento.

    Serie ciberpsicologia - Novedades en Psicologia

    CiberPsicología - Novedades en PsicologiaEbbok Gratis - CiberPsicologia: Relacion Mente e Internet - - La Casa del Libro- Cátedra Abierta de Psicología
    Ebbok Gratis CiberPsicologia: Relacion Mente e Internet  - Amazon - Cátedra Abierta de Psicología

  • ¿No alcanzar la felicidad puede llevar a la depresión?

    ¿No alcanzar la felicidad puede llevar a la depresión?

    Desde pequeños nos han dicho eso de «Vivieron felices y comieron perdices» como el final de los cuentos infantiles, como si ese fuese lo máximo a aspirar.

    La Felicidad

    Si algo ha caracterizado a la sociedad occidental, especialmente en la última década ha sido en la búsqueda de la felicidad.
    Al respecto se han escrito cientos de manuales de auto-ayuda, tratando de enseñar a descubrir la felicidad personal.
    Aunque cada autor la ha definido de forma diferente, y ha establecido un camino distinto para alcanzarlo, parece que todos han coincidido en entender que la felicidad se trata de una necesidad social, a la que hay que dar respuesta.
    Parece que todos debiéramos alcanzar la felicidad, como si de una norma social se tratase, ¿Quién no querría ser feliz?, no siendo suficiente con tener un trabajo, una casa o un coche, pero ¿No alcanzar la felicidad puede llevar a la depresión?


    P_WVjbtZCMc https://youtu.be/P_WVjbtZCMc

    Felicidad y Depresión

    Esto es precisamente lo que se ha tratado de averiguar desde la School of Psychology, University of New South Wales, Sydney, y la Australian Catholic University, Melbourne (Australia) junto con el Department of Psychology, University of Leuven, Leuven (Bégica) cuyos resultados han sido publicados en la revista científica Social Psychological and Personality Science.
    En el estudio participaron dos cientos estudiantes universitarios belgas, ciento diez mujeres y el resto hombres, con un rango de edad entre los diecisiete a veinticuatro años, extraídos de una muestra de seiscientos ochenta y seis voluntarios, todos ellos recibían una compensación económica por participar.
    Se evaluaron las expectativas sociales, especialmente en lo que respecta a las emociones negativas, como ante la soledad, depresión, tristeza o ansiedad; se midió la presencia de sintomatología depresiva mediante la escala estandarizada denominada Center for Epidemiological Studies Depression scale (C.E.S.-D.); se evaluó su nivel de soledad percibida mediante la University of California loneliness scale (U.C.L.A.).
    Todos los participantes pasaron por una situación donde se les manipulaba emocionalmente, haciendo sentir al estudiante mejor o peor consigo mismo.
    Los resultados muestran que aquellos alumnos que tienen mayores expectativas sociales para alcanzar la felicidad son los que peor soportan no alcanzarlo, provocando en ellos sentimientos de soledad y depresión.
    En cambio los alumnos que tenían bajas expectativas sociales sobre la posibilidad de alcanzar la felicidad, resultaron ser los más tolerantes ante el hecho de no lograrlo, no presentándose de forma tan acusada los sentimientos de soledad y depresión.
    Aunque los autores del estudio señalan que los resultados anteriores pueden ser diferentes en otras localizaciones, como en el caso de la civilización oriental, donde los valores y normas sociales cambian; a pesar de señalarlo, no lo han investigado.

    Fracaso Social y Felicidad

    Entre las limitaciones del estudio, señalar que se trata de un ambiente experimental, alejado de la validez ecológica, por lo que precisa de nueva investigación para comprobar si los datos se mantienen en la vida diaria de los participantes.
    El problema es, por supuesto, que no se puede ni debe manipular la vida del participante para conseguir que sea exitosa o un fracaso, para ver si correlaciona o no con las expectativas sociales.
    A pesar de lo cual, los resultados de la investigación debe hacernos reflexionar sobre las exigencias sociales, y cómo estas en ocasiones en vez de facilitar el camino, lo entorpecen, al pedir más de lo que la persona puede conseguir, convirtiéndolo en un «fracasado social», lo que acarrea sentimientos negativos que pueden conducir a la depresión.
    Una variable importante y fundamental a la hora de relacionar las experiencias vitales con las emociones es la inteligencia emocional, aspecto que tampoco ha sido evaluado en este estudio.
    Una adecuada formación durante la infancia en la Inteligencia Emocional, le va a permitir a la persona tener las herramientas necesarias para afrontar la frustración que provoca no poder llegar a las expectativas sociales de la felicidad, cuando esta no se alcanza.

  • ¿Se pueden prevenir los problemas de salud mental?

    ¿Se pueden prevenir los problemas de salud mental?

    Aunque existe un porcentaje de problemas de salud mental que es heredado, en la mayoría de los casos es preciso que se den las condiciones ambientales para desencadenarlo.
    La combinación de estos dos elementos, el genético y el ambiental, hace que surja con mayor facilidad los problemas de salud mental.

    Salud mental

    Pero incluso en una persona sana genéticamente, sin antecedentes familiares de problemas de salud mental, si es expuesto a condiciones nocivas, como al estrés continuado, esto puede en desencadenar problemas de salud mental, por ejemplo trastornos afectivos, como la depresión mayor o de ansiedad.
    Lo que no está todavía claro, es por qué a unas personas, las mismas o similares circunstancias, le puede desencadenar un problema mental y a otro no, partiendo de que ambas tiene una genética sin antecedentes familiares de estos problemas, entonces, ¿Se pueden prevenir los problemas de salud mental?



    Genetica y psicpatologia

    Esto es lo que se ha trata do de responder con una investigación realizada desde la Ruhr-University Bochum (Alemania), cuyos resultados acaban de ser publicados en la revista International Journal of Clinical and Health Psychology.
    En la muestra participaron estudiantes de tres grupos poblacionales diferentes, 8669 chinos, 604 rusos y 394 alemanes, todos ellos con una media entre los 21 a 26 años.
    A todos se les administraron las versiones traducidas para evaluar los niveles de estrés a través de la Depression Anxiety Stress Scale (D.A.S.S.-21) y la Brief Daily Stressor Screening (B.D.S.S.), igualmente se evaluó hasta qué punto este estrés afectaba a su salud a través de la Positive Mental Health Scale (P.M.H.), y por último se evaluó el nivel de estrés percibido a través de la General Self-Efficacy Scale (G.S.E.).
    Se consideró que los participantes tenían mayor salud mental negativa, a puntuaciones más elevadas en Depression Anxiety Stress Scale (D.A.S.S.-21) y mayor salud mental positiva, a mayores puntuaciones en Positive Mental Health Scale (P.M.H.).
    Los resultados informan que el estrés percibido juega un papel mediador tanto en la salud mental positiva y negativa, esto es, si la persona tiene altos niveles de autoeficacia percibida, la salud mental positiva es mucho mayor, que si tiene baja autoeficacia percibida donde la salud mental negativa crece.
    Estos resultado se mantienen en cada una de las tres poblaciones analizadas.

    Estres salud mental

    Los datos muestran que la autoeficacia percibida, es decir, la creencia que tenemos nosotros mismos de nuestra habilidad para el desempeño de tareas, es un factor mediador entre el estrés y la salud mental.
    Esto es, una persona sometida al estrés, si piensa y cree que no puede superar la situación, va a estar más expuesta a la aparición de problemas mentales, que alguien que piense y cree que sí puede superar esos problemas, lo que va a servirle para la prevención de problemas de salud mental.
    Aunque los resultados son claros, no parecen ser suficientes para explicar en todos los casos, por qué se producen y por qué no, la presencia de enfermedades mentales, que se puede dar incluso en personas con altos niveles de autoeficacia.
    Los autores señalan que deben de existir otros factores, que como la autoeficacia, estén mediando entre le estrés y la salud mental, y aunque indican algunos como el nivel de autoestima o de optimismo, no los analizan.
    El estudio trata de responder una importante cuestión, pero sólo constata la complejidad de la respuesta, comprobando cómo un factor, el de la autoeficacia, tiene un papel destacado, pero no es suficiente para actuar como predictor ni protector de la salud mental.
    Además la consideración del estrés como único o más importante elemento desencadenante de la salud mental, hace que se obvie las causas genéticas e incluso los problemas asociados al consumo de determinadas sustancias.
    Igualmente, el término de estrés empleado, es asimilado al estrés malo o distres, sin entrar en la consideración del eustrés o estrés bueno, que en vez de perjudicar al individuo, le ayuda a su superación personal, al presentarle metas que puede desempeñar, y cuyos resultados hacen que se sienta bien por haberlos alcanzado.
    Luego el estudio tiene importantes carencias tanto teóricas como de investigación, quizás por su ambiciosa pregunta a la cual quería dar respuesta
    A pesar de lo anterior, el entrar a tratar este tema, y el haber encontrado el destacable papel de la autoeficacia, deja constancia de lo que desde hace años e lleva reivindicando en los libros de autoayuda “!Querer es poder””, o más correctamente “Creer que se puede, es la base de no ser derrotado”.
    No se trata tanto de conseguir todo lo que uno quiera, si no, que cuando surja el estrés por no conseguirlo, o la frustración por el fracaso, no afecte de manera tan negativamente que pueda desencadenar en un problema de salud mental.

  • ¿Qué papel tiene la inteligencia emocional en las conductas de riesgo?

    ¿Qué papel tiene la inteligencia emocional en las conductas de riesgo?


    A pesar de lo mucho que se conoce sobre la inteligencia emocional, cada día se producen nuevos descubrimientos al respecto.

    Un reciente estudio analiza el papel de la inteligencia emocional en la asunción de conductas de riesgo entre los estudiantes universitarios.

    Inteligencia emocional

    La inteligencia emocional, es la capacidad que nos permite desempeñarnos adecuadamente con el manejo de las emociones, tanto positivas como negativas, la cual va a tener un papel destacado en nuestra forma de sentir, pensar y actuar.
    En contraposición, aquellas personas que tienen escasos niveles de inteligencia emocional, van a destacar por altos niveles de Alextimia, ya que según indican algunos autores se trata de un continuo.
    Se ha observado cómo las personas con altos niveles de Alextimia pueden llevar a realizar comportamientos antisociales, ya sea exponiéndose a conductas de riesgo para sí mismo o para los demás, donde las consecuencias sobre la propia salud e incluso la integridad personal pueden evidenciarse.
    Cuando uno piensa en conductas de riesgo, lo suele hacer en aquellos comportamientos más extremos, como el conducir a altas velocidades, o el hacer puenting, pero igualmente de arriesgado para la salud son conductas menos llamativas, como el consumo excesivo de tabaco, alcohol u otras drogas, pero ¿Qué papel tiene la inteligencia emocional en las conductas de riesgo?



    Conductas de riesgo

    Esto es precisamente lo que se ha investigado desde la University of Oviedo (Spain) cuyos resultados han sido publicados en el 2016 en la revista científica Journal of Nursing Education.
    En el estudio participaron doscientos setenta y cinco estudiantes del grado de enfermería.
    A todos ellos se les evaluó su nivel de Inteligencia Emocional mediante la escala estandarizada Schutte Emotional Intelligence Scale.
    Se evaluó la conducta de riesgo entendida esta como el del consumo de tabaco, alcohol, drogas ilegales, así como la realización de dietas poco saludables, si se tenía o no sobrepeso, si se trataba de una persona sedentaria o no, su nivel de exposición solar, y la práctica de relaciones sexuales sin protección. Además, se recogieron datos sociodemográficos y de satisfacción vital.
    Los resultados muestran que aquellos estudiantes que tenían niveles elevados de Inteligencia Emocional, muestran menos conductas de consumo excesivo de alcohol, no siguiendo dietas poco saludables y observando prácticas sexuales con protección.
    Al contrario, los que mostraban niveles más bajos de Inteligencia Emocional, que se correspondería con niveles más elevados de Alexitimia, mostraban conductas de riesgo en cuanto a un mayor consumo de alcohol, el seguimiento de dietas poco saludables y prácticas sexuales sin protección.
    No obteniéndose diferencias significativas en las conductas de riesgo de consumo de tabaco o drogas ilegales, el nivel de sobrepeso, el sedentarismo o el nivel de exposición solar en función del nivel de la Inteligencia Emocional.

    Investigación en universitarios

    Los autores señalan sobre los beneficios de tener altos niveles de inteligencia emocional a la hora de manejar adecuadamente la presión grupal, principal elemento en conductas como el consumo de alcohol.
    Indicar que el estudio únicamente recoge la información sobre las conductas de riesgo mediante autoinformes, lo que deja abierta la posibilidad a fenómenos como la deseabilidad social, a la hora de responder, es decir, decir lo socialmente aceptado, sin comprobar si se produce o no ese comportamiento en la realidad.
    Igualmente, el utilizar una población muy específica como son los universitarios, no permite realizar extrapolaciones sobre qué pasaría en otros jóvenes.
    A pesar de las limitaciones anteriores, los resultados parecen claros en cuanto a la conveniencia de educar a los más jóvenes para que tengan una inteligencia emocional desarrollada, ya que esto le va a servir para prevenir conductas de riesgo futuras.


    Ebook sobre Inteligencia y Emocion - Catedra Abierta de Psicologia y Neurociencias
    Psicología del Sueño - Novedades en Psicologia
    Ebbok Gratis - Inteligencia Emocional - Amazon - Cátedra Abierta de Psicología

  • ¿Sabes cuál es tu nivel de narcisismo expresado en la red?

    ¿Sabes cuál es tu nivel de narcisismo expresado en la red?


    La redes sociales actualmente son parte de lo que somos, sobre todo de los más jóvenes, influyendo en nuestro nivel de narcisismo.

    Personalidad e Internet

    Así nos expresamos de una forma u otra en las redes para conseguir un mayor reconocimiento social “virtual”, reforzando así los comportamientos narcisismo en la red.
    Si al principio algunas redes sociales buscaban conectar a amigos y compañeros de clase, tal y como fue el origen de Facebook, pronto los amigos de la “realidad” dejaron paso a los virtuales.
    Ya no se necesita que conozcas a alguien para que le agregues a tus redes sociales como “amigo”, ya que cuanto mayor número de personas agregadas, mayor será tu “caché” en Internet, situaciones que ha llevado incluso a empresas a ofrecer un número determinado de “amigos”, cientos o miles, por unos cuantos dólares.
    Todo ello no hace si no fomentar y reforzar el narcisismo de la persona, al verse “popular”, en un mundo virtual, atención que no consigue en su vida “real”, lo que hace que se fomente esta conducta en las redes, para aumentar esa sensación agradable otorgada por el narcisismo.
    Así, algunos autores han señalado que precisamente este narcisismo es el verdadero motivo por el que las redes sociales tienen tanto éxito entre los más jóvenes, los cuales están en una etapa evolutiva donde los iguales se convierten en su fuente de comparación, estando las acciones “bien o mal” en función de que “los otros” lo aprueben o no, pero ¿Sabes cuál es tu nivel de narcisismo expresado en la red?



    Narcisismo e internet

    Esto es precisamente lo que trata de explorarse desde la Universidad Central Nacional (Taiwan) , cuyos resultados han sido recientemente publicados en la revista científica Psychology.
    En el estudio participaron 471 estudiantes universitarios entre los 19 a 24 años, de ellos 221 fueron mujeres y el resto hombres.
    Todos ellos respondieron al NPI-40 (Narcissistic Personality Inventory) , con el objetivo de validar los 40 ítems que lo componían y los factores de narcisismo que se evaluaban, en concreto fueron siete, el grado de influencia de la persona en la red; el grado de influencia de los demás a la hora de tomar decisiones en la red; el grado en la que la personas se siente “brillante” y superior en la red; el grado de exponer todo en la red; la tendencia a la manipulación de otros en la red; el grado en que se busca uno a sí mismo en la red; y el grado en que cree que la red le proporciona beneficios en su vida.
    Los resultados muestran la validez y fiabilidad de la prueba desarrollada, evaluando correctamente el nivel de narcisismo de los usuarios de Internet.


    Comportamiento narcisista e internet

    Tal y como han señalado los autores en su artículo, el no disponer de una herramienta para evaluar el nivel de narcisismo en Internet, suponía una gran traba a la hora de realizar investigaciones con respeto a la personalidad en la red.
    La creación de un instrumento de evaluación es siempre un paso adelante en el conocimiento ya que permite comprender mejor los fenómenos observados, de forma que ahora se puede comparar el número de horas empleadas o las redes sociales más usadas con el nivel de narcisismo del usuario para así ver si existe correlación entre ambos.
    Igualmente se pueden realizar comparaciones con otras características de personalidad que se conocen que tienen una importante influencia en las redes sociales, como es el nivel de obsesión de los usuarios, el cual se ha visto que correlaciona positivamente con el uso intensivo de las mismas, siendo un buen predictor a la hora de evaluar los posibles comportamientos adictivos dentro de las redes sociales.

    Serie ciberpsicologia - Novedades en Psicologia

    CiberPsicología - Novedades en PsicologiaEbbok Gratis - CiberPsicologia: Relacion Mente e Internet - - La Casa del Libro- Cátedra Abierta de Psicología
    Ebbok Gratis CiberPsicologia: Relacion Mente e Internet  - Amazon - Cátedra Abierta de Psicología

Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario y ofrecer servicios personalizados. Al continuar navegando en este sitio, aceptas el uso de cookies. Puedes obtener más información y configurar tus preferencias en nuestra   Política del Sitio.

error: Content is protected !!