Los pequeños con autismo van a mostrar principalmente un retraso en el desarrollo del lenguaje, pero no va ser la única área afectada
Pequeños con autismo
Los padres rara vez están en sobre aviso de todas las dificultades que van a presentar los pequeños, ya que estos están centrados en el problema más evidente, la falta de desarrollo comunicativo.
Una realidad que a pesar de los avances que se han realizado en los últimos años, cada vez hay más pequeños diagnosticados con el Trastorno del Espectro Autista, tal y como se muestra en la gráfica interactiva siguiente:
Pero hay que tener en cuenta que cada uno de estos problemas, de tipo psicomotriz, emocional u o de otro tipo van a ir en detrimento de la calidad de vida del menor.
Tal es el caso del sueño, que va a afectar a nuestra salud, independientemente de que padezcamos o no autismo.
Los ojeras al día siguiente de haber pasado una «mala noche» no es más que el reflejo de todo un «abanico» de consecuencias que vamos a tener durante ese día, con agotamiento, cansancio, irritabilidad, …
Y eso que sólo hemos «perdido» una noche, cuando se presentan los trastornos del sueño con regularidad, la salud se va a resentir incluso pudiendo facilitar la aparición de enfermedades.
De ahí la importancia de tener un sueño de calidad, pero ¿Los pequeños con autismo presentan problemas del sueño?
https://youtu.be/ch816GJsRQs
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Niño con autismo
Esto es lo que se ha tratado de averiguar con una investigación realizada desde Sleep Disorders Division, Department of Neurology, Vanderbilt University School of Medicine, junto con el Department of Pediatrics, University of Colorado School of Medicine, el Biostatistics Center, Massachusetts General Hospital; el Department of Pediatrics, University of Rochester; el Department of Pediatrics, Nationwide Children’s Hospital, y el Department of Pediatrics, The Children’s Hospital of Philadelphia (EE.UU.) cuyos resultados han sido publicados en la revista científica Pediatrics.
En el estudio participaron 1.515 niños, de los cuales el 16% eran niñas, con edades comprendidas entre los cuatro a diez años.
Los padres de estos pequeños con autismo completaron un cuestionario estandarizado sobre hábitos nocturnos denominado Children’s Sleep Habits Questionnaire (C.S.H.Q.).
Igualmente se obtuvo información sobre el uso de medicamentos para dormir que estaban recibiendo estos pequeños.
Los resultados indican que el 71% de los pequeños con autismo presentan problemas de sueño, de los cuales escasamente el 30% estaba diagnosticado al respecto.
De los pequeños diagnosticados, el 43% recibía tratamiento farmacológico para facilitar el sueño.
Mariana, niña de 11 años con #TEA, testifica cómo el entrenamiento la ha ayudado a volver a correr. Https://t.co/HQIq5ioEeT — Venciendo el Autismo (@fvenceautismo) 16 de septiembre de 2016
Niña con autismo
Entre las limitaciones del estudio está la escasa inclusión de niñas en el mismo.
Igualmente, el estudio únicamente refleja las proporciones sin entrar a identificar ni las causas ni el tratamiento más efecto.
A pesar de lo anterior, los autores señalan que aquellos pequeños que eran medicados para el sueño, luego mostraban un comportamiento menos adaptativo y una peor calidad de vida.
Todo lo anterior tiene que hacer reflexionar a los padres, primeramente, que su pequeño con autismo probablemente esté sufriendo problemas del sueño, ya que afecta a 3 de cada 4.
Segundo que estos problemas tienen un efecto directo en su calidad de vida, y por tanto hay que diagnosticarlos y tratarlos.
Y tercero, que el tratamiento farmacológico no parece ser el más indicado para estos pequeños, debido a las consecuencias sobre su comportamiento y calidad de vida posteriores.
Los autores con respecto a este último punto señalan que sería mejor educar a los pequeños a tener una «higiene del sueño», esto es, aprender procedimientos para aumentar la calidad del sueño.
Entre las recomendaciones para que los pequeños puedan dormir mejor se pueden señalar:
– Mantener cierta regularidad en cuanto a la hora de dormir
– Procurar evitar las cenas copiosas
– No realizar actividades físicas intensivas antes de acostarse
– No ver la televisión ni otros equipos tecnológicos que puedan alterar al pequeño antes de acostarse
– Dormir en un cuarto espacioso y ventilado y sin ruidos.
Experta Colaboradora:
Dª Mabel Velandia Ramos
AUDIOLOGIST MINTIC- TELEMEDICIN
Teniendo en cuenta que el autismo es una discapacidad del desarrollo neurologico los estudios electrofisiologicos han identificado diferencias en la arquitectura del sueño significativas en especial para poder conciliar el sueño. Por lo cual a la hora de establecer un plan de tratamiento, es fundamental entender la etiologia subyacente del trastorno del sueño que en la mayoría de casos es multifactorial.