La vida de los deportistas se basa en estar en forma y entrenar mucho para poder rendir al máximo en las competiciones.
Padres de deportistas
Cuando uno piensa en jóvenes deportistas, imagina todo el esfuerzo y la dedicación que tienen que invertir para conseguir éxito en su carrera profesional. Muchos son los que inician el deporte pensando que podrán llegar hasta lo más alto, pero son pocos los que lo alcanzan.
Una vida de sacrificios con una media de ocho horas de entrenamiento, son necesarios para tener unas condiciones físicas óptimas y unas destrezas suficientemente desarrolladas.
Pero de nada sirve, si la persona no tiene las condiciones psicológicas adecuadas, algo de lo que hasta hace poco no se habían dado cuenta los equipos, y de lo cual ha surgido una nueva profesión, el psicólogo deportivo.
Entre sus muchas funciones, está el de dar soporte psicológico y ayudar a los competidores a estar en sus mejores condiciones mentales a la hora de afrontar las pruebas a superar. Algo que si bien parece depender de uno mismo, puede verse influido por los condicionantes externos, como quién serán los restantes competidores, en qué condiciones se disputa la competición,…, pero ¿Qué papel juegan los padres en los deportistas?
Familia deportistas
Esto es lo trata de averiguarse desde la Universidad Guru Nanak De, el Instituto Deportivo Armado, la Sociedad de Control AIDS del estado de Punjab (India) cuyos resultados se han publicado en la revista científica The International Journal of Indian Psychology.
En el estudio participaron 100 estudiantes de escuelas deportivas, 50 chicos y 50 chicas, con edades comprendidas entre los 14 a 18 años.
Todos ellos rellenaron dos pruebas, uno relativo al nivel de influencia de los padres en la vida del joven mediante la escala estandarizada, Parental Involvement Scale; y la segunda donde se evalúa el nivel de autoestima del joven mediante la escala Self-esteem Scale.
Según la escala de influencia de los padres, los resultados indican que los padres tienen significativamente una mayor influencia sobre las chicas que sobre los chicos.
No existen diferencias en cuanto al nivel de autoestima respondido entre los chicos y las chicas.
Analizando ambas en conjunto, no se obtienen diferencias significativas del nivel de autoestima en función de la influencia paterna.
Deporte y familia
Hay que tener en cuenta que el profesional deportivo no es una persona aislada del resto del mundo, y que cuando termina su entrenamiento o competición vuelve con su familia y su círculo de amistad, influyendo estos, aún sin saberlo, en el estado de ánimo y la autoestima de estos profesionales.
Igualmente hay que tener en cuenta el momento evolutivo del joven, donde los padres han pasado a un «segundo plano», convirtiéndose los iguales en su modelo de referencia, luego faltaría incluir en el estudio esta variable para comprobar si la autoestima es totalmente independiente del medio social del deportista o no.
A pesar de lo cual, el papel de «los otros» no parece ser tan determinante como a priori cabría esperar, entre otros motivos, por que en el papel del psicólogo deportivo está el de reforzar al autoestima de los atletas y sus convicciones sobre sus propias capacidades y potencialidades.
Al respecto y como excepción a lo anteriormente mencionado, únicamente hay que recordar varios casos notorios, en el que un jugador número uno del mundo, perdió su hegemonía justamente el año en que sus padres estaban divorciándose, lo que seguro originó gran tensión intrafamiliar, y al final afecto en el rendimiento deportivo.