Categoría: Blog de Articulos con Novedades de Psicologia

En esta sección de Novedades en Psicología escria por el Dr. Juan Moisés de la Serna, se incluyen los distintos artículos sobre las diversas temáticas de Psicología y Neurociencias más actuales y destacados en dichas areas.

  • Entrevista a la Dra. Rosa Montesinos Zevallos sobre la Demencia Vascular

    Entrevista a la Dra. Rosa Montesinos Zevallos sobre la Demencia Vascular


    Entrevista a Dª. Rosa Montesinos Zevallos, Jefa de Rehabilitación at Instituto Peruano de Neurociencias, quien nos va a hablar de la Demencia Vascular.




    – ¿Qué es la demencia vascular (DV)?

    En el contexto actual, DV puede ser definida como una deficiencia de las funciones cognitivas, con particular alteración inicial en las funciones ejecutivas que origina pérdida de la función de las actividades de vida diaria instrumentales, originada por alteración en las estructuras vasculares cerebrales, sin necesidad de evidencia clínica de lesión neurológica focal y con por lo menos alguna evidencia en las imágenes cerebrales de lesión de sustancia blanca, pudiendo esta ser focal o difusa, con o sin infarto. En este nuevo enfoque, DV estaría al final del continuum de una serie de sucesos originados por los factores de riesgo vascular-cerebral (hipertensión arterial, diabetes, tabaquismo, sedentarismo), enfermedad vascular cerebral (arterioloesclerosis, ateroesclerosis, angiopatía amiloide), injuria vascular cerebral (lesión de grandes o pequeñas arterias) y trastorno cognitivo vascular, antes de terminar en DV.

    – ¿Qué diferencias presenta la demencia vascular (DV) con respecto la enfermedad de Alzheimer (EA)?

    La principal diferencia radica en la fisiopatología de ambas; pues mientras DV es de origen metabólico, la EA es de origen degenerativo; de tal manera que mejor perfil de prevención tiene DV, pues se puede prevenir interviniendo en la modificación de los factores de riesgo.
    La segunda gran diferencia radica en el perfil clínico y neuropsicológico; pues en DV las fallas iniciales se presentan en las funciones ejecutivas y afecta la memoria en estadios más avanzados; mientras que en EA las fallas iniciales se presentan en la memoria episódica.
    Una tercera diferencia puede observarse en las imágenes cerebrales; pues en DV podemos observar desde lesiones de sustancia blanca, infartos lacunares hasta infarto de grandes arterias; mientras que en EA las alteraciones iniciales las observaremos en la atrofia del hipocampo y luego con el progreso de la enfermedad observaremos atrofia cerebral cortical a nivel temporo-parieto-occipital.
    Es importante mencionar que la proporción de “casos puros” de DV y EA son escasos, siendo más frecuente la combinación de ambas con predominio de una de ellas, fenómeno que conocemos como demencia mixta.


    Vídeo Recomendado: NEUROLOGIA – IPN – DALE VIDA A LOS AÑOS – PANAMERICANA TELEVISION – ENVEJECIMIENTO

    – ¿Tiene un mejor o peor pronóstico la demencia vascular en comparación con la enfermedad de Alzheimer?

    DV tiene un peor pronóstico. Dado que DV se encuentra al final de una serie de sucesos originados por diversos factores de riesgo vascular, los pacientes presentan además hipertensión arterial, diabetes, dislipidemia, ateroesclerosis, infartos cerebrales a repetición; por lo que los pacientes tienen una evolución rápidamente progresiva de manera escalonada, que empeora con la progresión de las alteraciones del flujo sanguíneo cerebral.
    Pero por otro lado, un adecuado control de dichos factores de riesgo, puede disminuir la carga tanto de trastorno cognitivo vascular (un término acuñado que es equivalente a trastorno cognitivo leve), como de DV.

    – ¿Cómo se trata a los pacientes con demencia vascular?

    El tratamiento de DV, al igual que en EA involucra el tratamiento de los síntomas cognitivos con inhibidores de colinesterasa y memantina; pero requiere además un estricto control del tratamiento de los factores de riesgo vascular para asegurar la posibilidad de disminuir el riesgo de injuria vascular cerebral; es decir disminuir la cantidad de lesiones cerebrales. Por otro lado, es importante el manejo de los síntomas conductuales y psicológicos, particularmente los trastornos del ánimo y apatía; así como los trastornos de la marcha con el apoyo de las estrategias de terapia física y rehabilitación cognitiva.


    – ¿Cuál es la relación entre los problemas del sueño como la apnea y la demencia vascular?

    En los últimos años, gran importancia se ha prestado a los trastornos del sueño que generan baja perfusión cerebral de oxígeno a ciertas áreas cerebrales sensibles a estos mínimos cambios, como el tálamo y lóbulos temporales. Los ronquidos, sobre todo con apnea generan disminución de la saturación de oxigeno medido a nivel capilar, lo cual genera hipoxia a nivel del tálamo y lóbulos temporales y posterior muerte neuronal con lesiones vasculares evidentes en las imágenes cerebrales. De esta manera se interrumpe los circuitos de los haces talamo-corticales, que explican las alteraciones de las funciones ejecutivas y posterior trastorno de memoria. Cómo es de suponer, estos pacientes no están relacionados con diabetes, hipertensión arterial, dislipidemia o tabaquismo en quienes es fácil sospechar que podrían desarrollar DV; de tal manera que el control y prevención de apnea, disminuyen el riesgo de DV.

    – ¿Cómo se interviene para tratar los problemas de sueño en pacientes con demencia vascular?

    Es importante detectar pacientes con ronquidos, quienes podrían tener además episodios de apnea, y establecer la causa de éstos. Apnea puede ser de origen obstructivo o central. En el primer caso, cualquier obstrucción a nivel de la vía aérea desde las fosas nasales hasta los bronquios pueden generar estas “pausas del sueño” y la evaluación por un especialista en otorrinolaringología puede ser de mucha utilidad; pero es mucho más frecuente que la causa de esta obstrucción se explique por obesidad por lo que la intervención de un nutricionista es de vital importancia. Mientras que en las apneas de origen central, cualquier alteración del tronco cerebral, principalmente de origen vascular puede generar “pausas del sueño”. En ambas condiciones, el uso de un dispositivo para mejorar el flujo sanguíneo de oxigeno como el CPAP mejora los ronquidos y el apnea.


    Vídeo Recomendado: Tratamiento de Demencias Vasculares [Subtitulado ESP] – www.cedepap.tv

    – ¿Cómo detectar problemas del sueño en paciente con demencia vascular?

    Es importante emplear un adecuado diario del sueño para determinar la hora de inicio, el número de despertares, ronquidos, pausas del sueño, movimientos involuntarios de extremidades, desórdenes conductuales del sueño y luego verificar somnolencia diurna excesiva durante el día; pues una de las causas más frecuentes es el apnea. Luego de confirmar alguna alteración se sugiere completar estudios en un laboratorio del sueño, como la polisomnografía que es de gran utilidad para establecer apnea y sobre todo para la titulación de la máscara del CPAP.




    Desde aquí mi agradecimiento a Dª Rosa Montesinos Zevallos, Jefa de Rehabilitación at Instituto Peruano de Neurociencias, por habernos acercado a la realidad de la Demencia Vascular y sus complicaciones.


    Alzheimer4 - Novedades en Psicologia

    MAL DE ALZHEIMER I - Novedades en Psicologia
    Ebbok Gratis - Mal de Alzehimer - La Casa del Libro- Cátedra Abierta de Psicología
    Ebbok Gratis - Mal de Alzehimer   - Amazon - Cátedra Abierta de Psicología
    MAL DE ALZHEIMER II - Novedades en Psicologia
    Ebbok Gratis - Mal de Alzehimer Sintomas Diagnostico - La Casa del Libro- Cátedra Abierta de Psicología
    Ebbok Gratis - Mal de Alzehimer Sintomas Diagnostico   - Amazon - Cátedra Abierta de Psicología
    MAL DE ALZHEIMER III - Novedades en Psicologia
    Ebbok Gratis - Mal de Alzehimer Tratamiento - La Casa del Libro- Cátedra Abierta de Psicología
    Ebbok Gratis - Mal de Alzehimer Tratamiento - Amazon - Cátedra Abierta de Psicología

  • Dime como piensas y te diré qué sustancia consumes

    Dime como piensas y te diré qué sustancia consumes


    Hoy en día existe un mayor acceso a la información sobre los efectos de las drogas.

    El problema de la adicción al tabaco

    A pesar de ello, hay personas que piensan que son “exageraciones” o que viven “de espaldas” a la información sobre sus efectos.
    Los jóvenes parecen ser los más tolerantes sobre la realidad del consumo de sustancias, llevados por el deseo de experimentar o romper las reglas, sin percatarse o querer enterarse de los riesgos para la salud física y mental de este consumo.
    Es cierto que no todas las sustancias (tabaco, alcohol u otras drogas) van a tener las mismas consecuencias personales y sociales, de hecho, alguna de ellas ha sido clasificada como una “droga social” ya que su consumo es “bien visto” socialmente o al menos permitido, mientras que otras son rechazadas públicamente.
    Luego están las drogas “polémicas” en el que “parece” no existir un consenso sobre los beneficios o perjuicios que provoca, como en el caso del cannabis. Una polémica social que no está fundamentada en la ciencia y sus resultados; a pesar de ello, los últimos estudios indican que los jóvenes están siendo cada vez más tolerantes hacia esta droga, asumiéndola como “poco peligrosa” y “beneficiosa” a pesar de los datos científicos en contra de su uso y abuso.
    A esta polémica se une que desde los poderes públicos no exista un consenso al respecto, así lo demuestra en EE.UU. donde existen estados donde el uso y consumo de la marihuana es legal y en otros no, tal y como se puede ver en la gráfica siguiente:

    Legalidad de la marihuana en EE.UU. | InsideGov

    La conciencia social ha sido el pilar fundamental sobre el que se ha basado las campañas de sensibilización de las instituciones y asociaciones contra la droga, asumiendo que cuanta más información esté disponible sobre las mismas y sus efectos, menos consumidores habrá, pero, ¿Existe relación entre nuestra forma de pensar y lo que se consume?


    Vídeo Recomendado: México abre la puerta a la legalización de la marihuana

    La adicción al alcohol

    Esto es lo que ha tratado de averiguarse con una investigación realizada desde el Department of Psychiatry and Human Behavior, School of Medicine Atma Jaya Catholic University of Indonesia (Indonesia) junto con el Nijmegen Institute for Scientist Practitioners in Addiction (NISPA), Radboud University, y el Department of Psychiatry, Donders Institute for Brain, Cognition and Behavior, Radboud University Medical Centre (Países Bajos) cuyos resultados han sido publicados en la revista científica Journal of Child & Adolescent Behavior.
    En el estudio participaron 306 estudiantes universitarios, de los cuales el 82.1% eran mujeres, con edades comprendidas entre los 19 a 23 años.
    Todos ellos tuvieron que contestar un cuestionario estandarizado sobre creencias en relación a las drogas denominado Illness perception questionnaire revised version for addiction (IPQ-A), para evaluar el consumo de sustancias en los treinta días previos a la evaluación se empleó el cuestionario estandarizado denominado CIDI.
    Los resultados muestran que las sustancias más consumidas entre los jóvenes son el alcohol (89%), el café, la nicotina (21%) y el cannabis (11%).
    Con respecto a la diferencia de género, se encontraron diferencias de género en el consumo de té (mayor en mujeres); el cannabis y los estimulantes (mayor en hombres).
    Para el análisis comparativo sobre las creencias sobre las drogas se separaron los participantes en función de si eran consumidores habituales (91 participantes) o no de sustancias (217 estudiantes).
    Los resultados mostraron diferencias significativas entre los consumidores y no consumidores a la hora de “comprender la adicción”, siendo significativamente más “comprensivos” los consumidores habituales. Igualmente, estos obtenían puntuaciones significativamente más elevadas en cuanto a la creencia de control sobre la adicción, pensando que podían dejarlo cuando quisieran.


    La adicción al cannabis

    Entre las limitaciones del estudio comentar que únicamente se basaron los resultados en las pruebas escritas y no en la observación ni en información de terceras personas.
    Igualmente, la selección de los estudiantes como sujetos de análisis, deja fuera a muchos otros jóvenes, por lo que no se puede concluir sobre la generalidad de los mismos.
    A pesar de las limitaciones anteriores hay que destacar la relación entre las creencias y el consumo de drogas, por tanto, los objetos de las campañas de sensibilización tendrían que ir más encaminadas a “luchar” contra estas dos creencias que son las que significativamente se muestran en los consumidores habituales.
    La creencia de la permisibilidad social, en que “todo vale” y la creencia de “falso control” que se puede dejar cuando se quiera deberían de ser los pilares de las campañas de lucha contra la droga, en función de los resultados de este estudio.
    Ya que la creencia contaría, es decir, no hay porqué ser tan “comprensivos” con los que consumen habitualmente drogas, o no es cierto que uno pueda dejar la droga cuando se quiera, estas dos creencias parecen haber “protegido” a los no consumidores.

  • ¿Es efectiva el Mindfulness en el TDA?

    ¿Es efectiva el Mindfulness en el TDA?


    Si pensamos en el T.D.A. lo hacemos en problemas atencionales, por lo que la intervención parece clara, lograr una mayor atención.

    El TDA

    El Trastorno por Déficit de Atención (T.D.A.) puede presentarse con problemas hiperactividad (T.D.A.H.) o sin ella, por lo que la característica principal no es tanto las “molestias” que puedan causar por no “estarse quieto” tanto en clase como en casa, si no la falta de atención.
    En ocasiones puede ser “fácil” confundir ambos síntomas, pensando que, si uno no se está quieto, difícilmente puede atender, priorizando así el tratamiento en aquello que se entiende más urgente, como es el control personal; con la idea de, si consigo que esté sentado y callado durante cinco minutos, al menos algo va a aprender.
    En cambio, si la concepción es que estos pequeños sufren problemas atencionales, y que son incapaces de una atención sostenida sobre una sola fuente de estimulación durante demasiado tiempo, el permanecer “parado” en un sitio no va a hacer que por sí vaya a atender lo que explica el profesor y aprender, ya que rápidamente se pondrá a “pensar en las musarañas” y seguirá sin prestar atención. Es por ello que a la hora de priorizar la intervención en el caso del T.D.A. se debe de hacer en el aspecto atencional.
    Hay que tener en cuenta que las consecuencias del TDA no se circunscribe a la infancia, sino que estas dejan “secuelas” para la vida adulta interfiriendo en el normal desarrollo y la calidad de vida de la persona, de ahí la importancia de realizar un diagnóstico adecuado para establecer así su tratamiento.
    Con respecto al tratamiento este normalmente ha ido asociada a la administración de psicofármacos unido a la terapia psicológica, al respecto han surgido algunas técnicas para lograr focalizar la atención y fortalecer el mayor tiempo posible dicha atención, como el caso del Mindfulness que se ha visto efectivo en el tratamiento del dolor, la ansiedad e incluso la depresión, pero ¿Es efectiva el Mindfulness en el TDA?


    Vídeo Recomendado: Déficit de Atención del Adulto, Mindfulness para regular las emociones y la impulsividad.

    Mindfulness y TDA

    Esto es lo que se ha tratado de averiguar desde la University of Windsor (Canadá) cuyos resultados han sido publicados en la revista científica Journal of Attention Disorders.
    En este caso se trata de un análisis bibliográfico, por lo que no existen pacientes a analizar, únicamente resultados presentados en publicaciones científicas y recogidos en las bases de datos más importantes en esta área como PsycINFO, PubMed o Google Scholar.
    Se analizaron diez estudios sobre los efectos de la aplicación del Mindfulness en pequeños con T.D.A. y nueve con T.D.A.H.
    Los resultados informan que en ambos casos existe una reducción significativa de la sintomatología asociada al TDA, siendo esta mayor en los casos de TDA frente a TDAH.


    Vídeo Recomendado: Mindfulness y TDAH. Marvin Belzer, PhD. (UCLA)

    Aplicación del Mindfulness en el ámbito del TDAH

    Hay que tener en cuenta que no se trata de un estudio clínico propiamente dicho si no de un análisis bibliográfico, por lo que sería conveniente realizar investigación al respecto donde se incluyesen tres grupos, pequeños con TDA, con TDAH y sin diagnóstico de TDA (grupo control). De esta forma podría concluir al respecto.
    Igualmente hay estudios que señalan una eficacia desigual dependiendo de la edad de los practicantes del Mindfulness, por lo que para conocer si esta variable también afecta en el caso del TDA se debería diseñar una investigación que comparase la eficacia de este tratamiento en adultos con TDA frente a niños con TDA.
    Si los resultados de los diseños anteriores resultan igualmente significativos, se puede afirmar que la aplicación de la técnica Mindfulness es útil para la aplicación en el caso del TDA, con lo que mejora su capacidad atención, y, por ende, favorece su desarrollo, a la vez que reduce otra sintomatología.
    Aspectos positivos que quedan reducidos cuando además el TDA se presenta con hiperactividad, en estos casos se tendría que analizar si con una intervención conjunta empleando Mindfulness y técnicas de corte cognitivo-conductuales son la más indicadas y efectivas en estos casos.
    Un último comentario es con respecto al orden de la intervención, en ocasiones se confunde el diagnóstico del T.D.A. con otros de similares características, sobre todo cuando el T.D.A. tiene hiperactividad asociada. Tal es el caso de los trastornos del comportamiento con inicio en la infancia o la adolescencia, como los trastornos hipercinéticos o los trastornos disociales recogidos en el CIE-10.
    En tales casos, se trata de un problema previo de diagnóstico, por lo que la intervención no se debe de centrar en la aplicación de técnicas para el manejar de la atención como la anteriormente presentada, si no en los problemas conductuales mostrados por los pequeños.

  • ¿Cómo se relacionan los temblores en el Párkinson?

    ¿Cómo se relacionan los temblores en el Párkinson?

    Los temblores es una de las consecuencias más evidentes en la enfermedad de Párkinson.

    El temblor de reposo

    Aunque se pueden emplear muchas clasificaciones sobre los temblores, en función de los músculos afectados o su función, en este artículo vamos a distinguirlos entre temblores de reposo y de acción.
    Los primeros hacen referencia a los músculos en estado de relajación, es decir, mientras la persona permanece quieta, ya sea de pie o sentada, sin hacer nada, y a pesar de ello la persona sufre temblores.
    Los temblores de acción son aquellos que aparecen únicamente cuando la persona va a realizar una acción, ya sea esta coger un objeto o andar.
    El inconveniente de sufrir estos temblores es que dificulta la acción emprendida, por ejemplo, cuando se quiere llevar la comida del plato a la boca, sufrir temblores de acción en la mano o el antebrazo supone que se vaya derramando la comida por el camino debido a dichos temblores.
    A este respecto la compañía Google diseñó y comercializó en el 2014 una cuchara antimovimientos con tres niveles de temblores con los que compensar “inteligentemente” dichos movimientos, y permitir con ello una mayor independencia por parte de los pacientes de Párkinson.


    Vídeo Recomendado: Cuchara ‘inteligente’ que ayuda a comer a los enfermos de Parkinson

    Temblor de reposo vs. temblor de acción

    Entre los dos tipos de temblores el de reposo y el de acción, este segundo es el más frecuente entre los pacientes de Párkinson, el de reposo puede aparecer también en los movimientos de acción, dificultando aún más dicha acción.
    Hay que recordar que cuando se ejecuta una acción, por ejemplo, al flexionar el brazo, hay músculos que se contraen, que es cuando sufren el temblor de acción, y músculos que permanecen relajados, que no suelen sufrir temblor, pero ¿Cómo se relacionan los temblores en el Párkinson?


    https://youtu.be/v=JRSj4X0PmDk

    Vídeo Recomendado: Motricidad fina

    El temblor de acción

    Esto es precisamente lo que se ha tratado de averiguar con una investigación realizada desde el Parkinson’s Clinic of Eastern Toronto and Movement Disorders Center (Canadá) cuyos resultados han sido publicados en la revista científica Journal of Neurosciences in Rural Practice.
    En el estudio participaron cien pacientes diagnosticados con la enfermedad de Párkinson, con edades comprendidas entre los cuarenta y tres a novena y nueve años, a quienes se les observó la lateralidad de sus temblores, tanto de los de reposo como de acción. Estudiándose únicamente los temblores en las extremidades superiores, evaluado mediante el Unified PD Rating Scale (UPDRS).
    Los resultados indican una relación inversa entre la intensidad del temblor de reposo y el de acción, relación que únicamente se mantiene en el mismo lado del cuerpo. Así la presencia de temblor de temblor de reposo moderado en una extremidad hace que, en ese lado del cuerpo, exista significativamente una menor probabilidad de sufrir temblor de acción.


    El temblor en el Párkinson

    Una de las limitaciones de estudio es precisamente que hayan elegido analizar únicamente un grupo muscular, las extremidades superiores dejándose sin estudio otros grupos musculares tan importantes como las piernas.
    El estudio no informa sobre una evaluación de los pacientes diagnosticados con la enfermedad de Párkinson luego se desconoce en qué fase se encuentra cada uno de ellos, lo que no permite agruparlos y observar si los resultados anteriores van cambiando a medida que avanza la enfermedad de Párkinson.
    Tal y como afirman los autores, las conclusiones de sus estudios ayudan a comprender los temblores en los pacientes con Párkinson, y a establecer programas de intervención que ayuden a paliar sus efectos en la medida de lo posible.
    Igualmente, los autores señalan cómo el temblor de acción está bien estudiado, no así el temblor de reposo, existiendo una laguna en cuanto a la interacción de ambos temblores que han tratado de cubrir con esta investigación.
    Hay que tener en cuenta que, en el caso de la enfermedad de Párkinson, lo importante es ofrecer calidad de vida a los pacientes, para que sean el mayor tiempo posible independientes y autónomos, de ahí que estos estudios arrojen luz sobre en qué y cómo intervenir, ya que ayudan a conocer un poco mejor los efectos de esta enfermedad.


    Vídeo Recomendado: Rigidez

    Evaluando el temblor enfermedad de Párkinson

    Existen varias escalas para evaluar el avance de la enfermedad de Párkinson, con lo que poder establecer su gravedad y el tratamiento en cada caso, a continuación, se comenta las fases según la clasificación de Hoehn y Yahr:
    Fase 0. No hay síntomas visibles del padecimiento.
    Fase 1. Temblor distal (en alguna extremidad), asociado a un solo lado.
    Fase 2. Temblor asociado a ambos lados, lo que se suele “compensar” por parte del paciente con cambios posturales y de la marcha
    Fase 3. Enlentecimiento psicomotor, se empieza a ver entorpecida la marcha con problemas equilibrio
    Fase 4. Dificultades para mantenerse en pie sin ayuda, rigidez muscular.
    Fase 5. Incapacidad del paciente para mantenerse en pie.

Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario y ofrecer servicios personalizados. Al continuar navegando en este sitio, aceptas el uso de cookies. Puedes obtener más información y configurar tus preferencias en nuestra   Política del Sitio.

error: Content is protected !!