Etiqueta: terapia

  • Entrevista a D. Bernardo Ruiz Victoria sobre adicciones

    Entrevista a D. Bernardo Ruiz Victoria sobre adicciones


    Entrevista a D. Bernardo Ruiz Victoria, Psicólogo Clínico, quien nos introduce al difícil mundo del tratamiento de adicciones, presentando su innovador programa denominado Programa Victoria.




    – ¿A partir de qué edad se puede diagnosticar con adicción?

    En mi experiencia he encontrado casos de adicción al alcohol, y a otras substancias, a partir de los 15 años, aunque siempre hay que evaluar los casos individualmente para sacar conclusiones.

    – ¿Qué consecuencias tienen las adicciones?

    La principal consecuencia de la adicción, independientemente de la substancia de que se trate, es la progresiva pérdida de libertad del sujeto. La persona adicta va viendo como cada vez le cuesta más trabajo controlar su propia conducta, lo cual le produce sentimientos contradictorios, de culpabilidad, de impotencia, etc. Una lucha interior que es una constante fuente de ansiedad y de sufrimiento.
    Otras consecuencias son el progresivo deterioro de la vida familiar, del rendimiento laboral, aislamiento social, trastornos de ansiedad o depresión, conducta violenta, etc.
    Aparte de esto están las consecuencias sobre el propio organismo debido al abuso de la substancia que se trate, y que pueden variar mucho de unos individuos a otros, y en función de las diferentes substancias consumidas, pero que en todos los casos representan un daño creciente a la salud, tanto en el plano orgánico como en el psicológico.
    En resumen, la adicción daña de una forma progresiva la salud, el bienestar interior, la vida social y familar, el rendimiento laboral y, en definitiva, hace a la persona que la padece y a quienes le rodean, profundamente infelices.

    – ¿Cuáles son las principales dificultades para dejar las adicciones?

    La mayor dificultad está en reconocerse a uno mismo como víctima de la adicción.
    El proceso adictivo se basa en dos pilares fundamentales: la mentira y la soberbia.
    La mentira comienza en el momento en el que el sujeto adicto atribuye sus problemas a otras causas. La persona tiende a pensar que no es el alcohol lo que está dañando su vida, sino que las cosas le van mal por cualquier otro motivo.
    La persona se deja engañar por los mensajes ambiguos y equívocos que se pueden encontrar en medios de comunicación o en la sociedad en general, por ejemplo, que beber alcohol moderadamente es bueno para la salud. De ahí se saca la errónea conclusión de que uno bebe siempre moderadamente – «yo bebo como todo el mundo, lo normal» – y cuesta mucho reconocerse como bebedor abusivo, y mucho menos como adicto.
    Otra mentira, o más bien autoengaño, es la de afirmarse a si mismo o a otros cosas como «yo lo puedo dejar cuando quiera», «yo no soy alcohólico» o «yo lo controlo». Dado que uno siempre conoce a personas que, aparentemente, beben o consumen más cantidad, o sufren peores efectos y consecuencias, el autoengaño conduce a la autojustificación – «yo no soy como Fulano» – y por lo tanto puedo seguir bebiendo, o consumiendo drogas porque «yo se controlarme». Y suma y sigue.
    También la mentira llega un momento en que lleva al sujeto a intentar engañar a los demás fingiendo que bebe, o consume, menos de lo que en realidad hace. Puede directamente negarlo cuando se le pregunta, o bien minimizarlo diciendo, por ejemplo – «solo he tomado una» – o alegar que se encuentra perfectamente, que cumple en su trabajo, o recurrir a cualquier otra justificación.
    Otras veces el sujeto «pasa a la clandestinidad», es decir, empieza a beber o consumir a escondidas, a solas, o en lugares diferentes a los que frecuenta en su vida social «normal», con la vana pretensión de que de esa manera logrará engañar a las personas que le conocen y que, probablemente, ya han empezado a preocuparse por él y tal vez a recriminarle su comportamiento.
    Todos estos comportamientos, consecuencia de la mentira y el autoengaño, tienen como resultado que la persona sigue empeorando en su adicción.
    En cuanto a la soberbia, se manifiesta en los pensamientos que tiene el sujeto adicto en relación a su capacidad de controlar o superar su adicción sin ayuda de nadie.
    Cuando se hace evidente que el problema existe, frente a la familia por ejemplo, la persona adicta tiende a creer, y a proclamar, que solo es una cuestión de fuerza de voluntad y determinación personal, y que si se lo propone, dejará de beber, o de consumir drogas, por si mismo. De ahí vienen las promesas, que al no ser capaz de mantener en la práctica, conducen de nuevo a la mentira y al autoengaño. Y vuelta a empezar.
    Tanto la mentira, como la soberbia, dificultan mucho que el paciente de los pasos que resultan fundamentales para superar el problema:
    1.- Reconocer que existe una adicción
    2.- Aceptar que es necesaria una terapia para superarla

    – ¿Cómo surge el Instituto Detox y a quién va dirigido?

    El Instituto Detox es un equipo profesional especializado en el tratamiento de las conductas adictivas, el alcoholismo y otras adicciones. Su actividad va dirigida a todas las personas afectadas de una u otra forma por los problemas derivados del abuso y dependencia del alcohol y otras drogas, ofreciendo servicios profesionales de tratamiento y prevención para individuos, familias, instituciones públicas y empresas de todo tipo.

    – ¿Qué serivicios ofrece el Instituto Detox?

    El principal de todos es el Programa Victoria, que es un método terapéutico original, fruto de años de estudio, trabajo e investigación, para tratar la adicción y sus consecuencias. El lema del Programa Victoria es «Aprender a Vivir sin Adicción».
    También ofrecemos servicios de Prevención para el mundo de la empresa, orientados a evaluar tempranamente los casos de riesgo de abuso o dependencia del alcohol y de otras drogas, y aplicar un método de intervención preventiva que ayude a corregir los hábitos de abuso cuando todavía es posible, remitiendo a las personas adictas al Programa Victoria para completar su tratamiento y superar la adicción.
    Otros servicios que ofrecemos son, por ejemplo, asesoramiento a instituciones públicas sobre políticas de actuación en el ámbito de las adicciones, formación para profesionales de la salud, padres, educadores, etc.



    – ¿Qué pecularidades tiene el Programa Victoria?

    El Programa Victoria tiene varios rasgos diferenciales que lo hacen único:
    1.- Todos los pacientes que participan en él comienzan la fase residencial de la terapia a la vez, lo cual permite estructurar los contenidos terapéuticos de una forma lógica y secuencial y abreviar mucho el tiempo de tratamiento. De este modo conseguimos que la duración sea tan solo de 10 días.
    2.- El tratamiento se realiza en un hotel, no en un hospital psiquiátrico, ni general. Tampoco en una comunidad terapéutica. El hotel está siempre ubicado en un lugar tranquilo, alejado de centros urbanos y ambientado de forma que invite a la relajación y a la introspección.
    3.- El grupo de pacientes es muy reducido, máximo ocho personas en cada ocasión, lo que permite un trato muy individualizado y personalizado, con un acceso directo e inmediato a los terapeutas, que siempre están disponibles durante los diez días de terapia residencial. No solo en las sesiones formales de terapia sino también en las comidas y en los ratos libres.
    4.- Las técnicas terapéuticas que conforman el Programa Victoria se combinan de una manera única para maximizar su efecto positivo. Los componentes principales son los siguientes:
    4.1.- El ABC de la conducta adictiva. Enseña los conceptos del análisis funcional de la conducta aplicándolos al caso particular de las adicciones de los pacientes de cada grupo.
    4.2.- Terapia de Rechazo. Técnica terapéutica basada en los principios del condicionamiento clásico para asociar mental y emocionalmente las bebidas alcohólicas, y otras substancias objeto de adicción, con sensaciones negativas y desagradables, para cambiar así el paradigma mental y dejar de percibirlas como algo atractivo y tentador, y en su lugar sentirlas como algo negativo, desagradable y merecedor del más profundo de los rechazos.
    4.3.- Técnicas de Autocontrol Emocional. A través de la Relajación, la Visualización y los Pensamientos Positivos, los pacientes aprenden a manejar los estados de ánimo negativos que han sido desendadenantes de su conducta adictiva, preparándose así para prevenir las recaídas.
    4.4.- Documentales y Películas. Mediante el visionado y comentario de diferentes materiales audiovisuales los pacientes tienen la oportunidad de identificarse con otras personas que han padecido problemas de adicción similares, de expresar sus propios sentimientos, de tomar conciencia de las situaciones que han vivido, etc.
    4.5.- Lecturas y Trabajos Individuales. Los pacientes reciben un material de trabajo personal que van elaborando y completando día a día y que les ayuda a fijar los conocimientos que van adquiriendo en las distintas sesiones terapéuticas y a consolidar los cambios de actitudes y de conducta.

    – ¿Qué exito tiene el Programa Victoria?

    Es difícil dar unos datos fiables sobre el éxito terapéutico de cualquier tratamiento para la adicción, dado que depende mucho del tiempo transcurrido para valorar la evolución de los pacientes.
    En nuestro caso estamos enormemente satisfechos de los resultados obtenidos, a pesar de que existen recaídas en un número que siempre resulta doloroso para los terapeutas por mucho que sea inferior a lo que se reseña en la literatura científica seria sobre la materia.
    Hace unos años, un estudio independiente realizado por el Dr. Joaquín Bedia de los Servicios Médicos de Lagun-Aro (entidad encargada a la sazón de la asistencia médica de los cooperativistas del Grupo Mondragón) que nos había enviado muchos pacientes al Programa Victoria, hizo un seguimiento a casi un centenar de pacientes una vez que habían pasado entre 5 y 8 años de su tratamiento y encontró solamente un 6 % de recaídas confirmadas. Más de un 67 % de los pacientes seguían sin beber, un 2 % habían fallecido y sobre el resto no se pudieron recabar datos por diferentes motivos.




    Desde aquí mi agradecimiento a D. Bernardo Ruiz Victoria, por habernos acercado al mundo del tratamiento de las adicciones y a su innovador programa Victoria del Instituto Detox.

  • ¿Es posible detectar la adicción a internet en jóvenes?

    ¿Es posible detectar la adicción a internet en jóvenes?

    Actualmente es difícil encontrar un estudiante que no use habitualmente internet para sus labores o para ocio, por ello puede sufrir adicción a internet.

    Internet y jóvenes

    Cada vez la incursión de las nuevas tecnologías se realizan a más temprana edad, prácticamente desde los primeros años de vida, nuestros hijos ahora disponen de tablets, y con unos años más tienen su propio smartphone, con acceso a internet.
    Hoy incluso en las escuelas se fomenta el uso de las nuevas tecnología, a través de las tablets en sustitución de los libros, además de que el profesor usa su pizarra electrónica todo ello conectado a internet, donde se diseñan materiales de consulta específicos para las clases.
    Pero cuando uno empieza con internet, no existe limitación en su uso, sobre todo cuando se adentra uno en los juegos o en las redes sociales, una actividad que cada vez va requiriendo de mayor tiempo, hasta que sin saber cómo se puede llegar a desarrollar un adicción, con todas las consecuencias negativas tanto en el desempeño académico, como en lo que respecta la socialización con sus iguales por parte del joven, y en algunos casos además conlleva cierto desatención personal que se puede mostrar con desaliño y falta de higiene.
    Todo ello se considera como expresión propia de una adicción comportamental, que ha de ser superada con intervención de un especialista, y que en muchos casos requiere como primera medida corta todo acceso del menor a internet, tal y como se haría con otro tipo de adicciones, pero ¿Es posible detectar la adicción a internet en jóvenes?



    Adicción e Internet

    Esto es precisamente lo que tratan de analizar desde la Universidad Payame Noor (Irán) cuyos resultados han sido recientemente publicados en la revista científica International Journal of Behavioral Research & Psychology.
    En el estudio participaron 380 estudiantes, 194 chicas y 186 chicos, todo ellos cursando en el instituto.
    Se planetaron tres objetos de estudio, el primero, determinar hasta qué punto los jóvenes estudiantes sufren adicción a internet, el segundo, comprobar si esa presencia de adicción se relaciona con el nivel de sinceridad que expresa dentro de la familia, y por último si existen diferencias entre género en las dos anteriores.
    Para ello se empleó el cuestionario estandarizado Internet Addiction Test (IAT) para evaluar el nivel de adicción a internet de los jóvenes, y uno creado al efecto para evaluar el nivel de sinceridad en casa de los participantes.
    Los resultados informan de que los chicos experimentan significativamente un mayor nivel de adicción a internet que las chicas.
    Igualmente el nivel de falta de sinceridad intrafamiliar aumente a media que lo hace la dependencia a internet, y por tanto se expresa significativamente en mayor medida en los chicos frente a las chicas.
    Por lo que es posible detectar la adicción entre los chicos simplemente observando el nivel de sinceridad de estos en la familia, cuando empieza a buscarse escusas o a inventar motivos, puede ser un buen indicativo para sospechar que el joven puede estar empezando a sufrir adicción a internet.
    Regla que no se puede aplicar a las chicas, ya que estas, a pesar de sufrir menores niveles de adicción a internet, cuando lo hacen, no se expresa con una menor sinceridad dentro de la familia, lo que a su vez hace más difícil su detección y por ello su intervención para que lo supere.
    Esto indicaría que los chicos son más sensibles a sufrir este tipo de adicción relacionado con las nuevas tecnologías, lo que va a repercutir negativamente en la calidad de la convivencia familiar, al tratar de «esconder» su adicción.


    Adicción, Internet y Jóvenes

    Todo ello se puede emplear para establecer programas de prevención entre los propios estudiantes, para que desarrollen herramientas con los que enfrentarse a la adicción a internet, e incluso entre los padres, para que estos tengan claros los primeros síntomas de la adicción para poder intervenir cuanto antes.
    Aunque los resultados son claros, se precisa de más investigación para poder alcanzar conclusiones al respecto, ya que se trata de un estudio focalizado en una población con características específicas, no encontrándose el país entre los 10 primeros a nivel de numero de usuarios de internet, empleado a diario por un poco más de la mitad de la población actual (53,3 %), muy por detrás de países como Noruega, Islandia, Países Bajos, Suecia o Dinamarca, todos ellos por encima del 90 %, según datos recogidos por Internetworldstats

    Serie ciberpsicologia - Novedades en Psicologia

    CiberPsicología - Novedades en PsicologiaEbbok Gratis - CiberPsicologia: Relacion Mente e Internet - - La Casa del Libro- Cátedra Abierta de Psicología
    Ebbok Gratis CiberPsicologia: Relacion Mente e Internet  - Amazon - Cátedra Abierta de Psicología

  • Entrevista a Dª. Laura Gersberg, Directora General en Equipo Argentino de Toxicomanías

    Entrevista a Dª. Laura Gersberg, Directora General en Equipo Argentino de Toxicomanías


    A continuación transcribo entrevista realizada a Dª. Laura Gersberg, quien nos habla sobre su labor contra las Toxicomanías.




    – ¿Qué son las Toxicomanías?

    Las toxicomanías como su etimología indica es la compulsión irrefenable del uso de sustancias.

    – ¿Han variado en los últimos años las sustancias asociadas a lasToxicomanías?

    Si han variado, han mayor uso de acuerso a las estadísticas de uso problemático de sustancias legales como las benzodiazepinas, el alcohol, tabaco, al menos en Argentina, así lo indican las estadísticas, luego cocaína y marihuana. A la vez existen con mucho menos uso, drogas de diseño que hace 20 años no estaban en circulación, y la Pasta Base de Cocaína, cuya incidencia es escasa pero sus daños enormes.

    – ¿Qué perfil tienen las personas afectadas por Toxicomanías?

    Desde mi posición, no generalizo, puede ser una ama de casa o un hombre de negocios tanto como un adolescente, el problema para mí no es la sustancia sino la persona que por personalísimas y singulares razones se acerca y vincula problemáticamente a una sustancia inerte que no pide ser consumida

    – ¿Existen más personas en los últimos años afectados por Toxicomanías?

    Posiblemente,la expansión haya sumado usuarios, debido a la estrategia y el marketing de narcotráfico

    – ¿Qué consecuencias tiene las Toxicomanías en la vida de los afectados?

    Las consecuencias son múltiples y dependen de la persona, la sustancia, el back up alimentario, la edad, el medio familiar y social. Si se trata de personas que además presentan trastornos psiquiátricos ó devienen psicosis tóxicas y transitorias oir el mismo consumo. Lo que es claro es que ningún consumo, legal o ilegal (no lo diferenciamos, ponemos el acento en lo compulsivo) es inocuo y con diferencias significativas en cuento al daño en cada uno.


    Vídeo Recomendado: VIDA Y ESTILO TVNL DR HUERECA TOXICOMANIA

    – ¿Qué tratamientos tienen las Toxicomanías?

    Nosotros trabajamos con un encuadre y dispositivo integral que incluye equipo multidisciplinario, desintoxicación médico-farmacológica y en los casos que es posible, internaciones domiciliarias, todo el personal actuante es graduado universitario y especializado en esta patología.




    Desde aquí mi agradecimiento a Dª. Laura Gersberg, Directora General en Equipo Argentino de Toxicomanías por habernos acercado a una realidad de su trabajo contra las Toxicomanías.

  • ¿Qué mecanismo están involucrados en la conducta adictiva?

    ¿Qué mecanismo están involucrados en la conducta adictiva?

    Uno de los problemas de la conducta adictiva es descubrir a qué se debe, y por qué afecta a unas personas y no a otras.

    Uno de los problemas entre aquellas personas que sufren adicción es que suelen tener baja tolerancia a la frustración y quieren lograr rápidamente la recompensa por aquello que hace.
    Es decir, tienen escasa persistencia en las tareas que realizan, sobre todo si estas conllevan un esfuerzo o tiempo continuado.
    Estas actitudes se han observado tanto en la ludopatía, como en otras adicciones donde la persona trata de saciar su dependencia realizando aquello que considera placentero siempre que puede.
    De ahí la gravedad de la adicción, no sólo por el consumo de una sustancia más o menos tóxica para el organismo, o de llevar a cabo una acción repetida, si no que estas conllevan unas consecuencias personales, económicas y sociales por su repetición.
    Es decir, el hecho puntual, de ir a jugar a un casino puede que no tenga mayores consecuencias, pero si se vuelve una y otra vez, gastando grandes cantidades de dinero, y no se puede dejar de pensar en jugar y jugar, se puede afirmar que la persona está enfrentándose a una adicción.
    Mucho se ha tratado de analizar sobre las características personales de los que sufren una adicción, para poder prevenirlo. Ya que si existiese un perfil definido, se podrían implementar planes que buscasen reforzar las habilidades sociales y personales para no involucrarse en estas conductas adictivas.
    Pero a pesar de los avances en cuanto a tratamiento, poco se ha averiguado a la hora de la prevención. pero ¿Qué mecanismo están involucrados en la conducta adictiva?



    Esto es precisamente lo que tratan de averiguar desde la Universidad de Liege (Bélgica) y la Universidad de Ginebra (Suiza) recientemente publicado en la revista científica Plos ONE.
    Los autores de este estudio se han centrado en una única característica, la persistencia, definida como la habilidad de mantener la motivación interna en ausencia de recompensa externa inmediata.
    En el estudio participaron 35 personas, 20 mujeres y 15 hombres, con una edad media de 22 años, de los cuales 2 fueron excluidos durante la prueba.
    Entre las características que debían de tener para poder participar en el estudio estaban las de no sufrir depresión evaluado mediante Beck Depression Inventory, ansiedad evaluado mediante Beck Anxiety Inventory, y tener unos niveles de alexitimia normales evaluados mediante Bermond-Vorst Alexithymia Questionnaire.
    Ya que se ha observado que la presencia de cualquiera de estos tres factores va a variar en sobremanera los resultados en las pruebas de persistencia tal y como lo reflejan estudios anteriores.
    Los participantes se separaron en dos grupos según su mayor o menor nivel de tolerancia a la frustración.
    A todos se les registró la actividad cerebral mediante resonancia magnética (fmri) mientras realizaban una tarea en que debían de completar los participantes era ver una serie de imágenes en la pantalla del ordenador e indicar cuán intenso era la emoción que le generaba.
    Los resultados indica una actividad cerebral diferente en función que los estímulos presente fueran positivos, negativos o neutros al comprarlos entre participantes con baja persistencia frente a los de alta persistencia.
    Así los de baja persistencia, que mostrarían un patrón más próximo al esperable a una persona vulnerable a las adicciones, muestran una menor actividad en las amígdalas y el hipocampo a la hora de percibir los estímulos positivos y neutros.
    Y unas diferencias significativas en las amígdalas, y la corteza izquierda orbitofrontal a la hora de analizar los estímulos negativos.
    Esto quiere decir, que las personas con baja persistencia ven y sienten de forma diferente a los que tienen alta persistencia y puede estar el origen de las adicciones en esta percepción diferencial de la realidad.
    A pesar de los resultados, una de las limitaciones importantes del estudio es precisamente el haber seleccionado una única variable como responsable de la conducta que puede explicar las adicciones, siendo este un factor destacado pero no el único a tener en cuenta.
    Es por ello que se requiere de nueva investigación al respecto para poder comprender en su conjunto otras variables implicadas y con ello tratar de comprender el fenómeno de la adicción para poder implementar programas de prevención más eficaces, que eviten en la medida de lo posible que las personas más vulnerables a la adicción caigan en ella.
    Igualmente es preciso crear un grupo de personas adictas frente a otras de control con las que comparar, ya que en el estudio no se especifica si los participantes tenían alguna adicción o no, y de tenerlo en qué grado.

  • ¿Puede la música beneficiar a los adictos en tratamiento?

    ¿Puede la música beneficiar a los adictos en tratamiento?

    Una de las problemáticas con respecto a las terapias de la adicción es que no existe un tratamiento que permita beneficiar a los adictos.

    Por lo que se han desarrollado distintas estratégicas terapéuticas en función del tipo de adicción, teniendo en cuenta que además de la adición fisiológica hay que tratar también la adicción psicológica, esto es el componente psicológico de la adicción que aumenta el riesgo de recaídas.
    El lugar donde vivimos o trabajamos, la disponibilidad de acceso a la sustancia o conducta adictiva, e incluso las personas con las que nos relacionamos, van a ser indicativos de activación de una serie de costumbres y hábitos que se suelen acompañar a dicho comportamiento.
    Es por ello, que muchos programas de desintoxicación lo primero que hacen es romper con esas «señales» tanto laborales como sociales, en donde la persona se siente cómoda e inicia su comportamiento aditivo.
    La separación de familiares y amigos, evitar que pase por lugares donde tiene acceso a su sustancia o comportamiento adictivo son fundamentales para prevenir la «tentación» y por tanto van a beneficiar a los adictos a que vayan perdiendo esas costumbres.
    Igualmente es importante la intervención psicológica para que la adicción no cambie, y consuma ahora una nueva sustancia o genere un nuevo comportamiento adictivo, enfrentando y afrontando la problemática del adicto, y enseñándole estrategias y habilidades para afrontarlo, se ayuda a que la persona sea más consciente de sus limitaciones y necesidades, así como que sepa demandarlo y expresarlo adecuadamente, sabiendo qué puede o no esperar de los demás, y cuál es el método más correcto de reaccionar ante la frustración en caso de conseguir aquello que quiere.
    Toda un intervención en la vida de la persona para cambiar su concepción de sí mismo y de la relación que entabla con su medio ambiente, con lo que darle herramientas para afrontar la vida con nuevos ojos que haga que no tenga que recurrir a la adicción como vía de escape o de evitación de asunción de la realidad que vive.



    Esto es precisamente lo que se trata de investigar desde la
    Universidad de Marburg, la Universidad Justus Liebig Giessen y la Universidad Internacional de Psicoanálisis de Berlin (Alemania) recientemente publicado en la revista científica Research Journal of Drug Abuse.
    En la investigación participaron 190 pacientes de los cuales 28 eran adictos a sustancias y el resto servirían de grupo control.
    A todos ellos se les administraron las siguientes pruebas: un inventario sobre el uso habitual de música (inventory for the assessment of activation and arousal modulation through music – IAAM), una escala de autoconcepto (self-concept inventory – SKI) y una sobre la funcionalidad global de la persona (Global assessment of functioning- GAF).
    Se analizaron las diferencias significativas entre los adictos y el grupo control encontraron diferencias significativas en cuanto a la funcionalidad, mostrando un menor nivel significativo los adictos. Con respecto a la música, los adictos escuchaban significativamente más música para relajarse o concentrarse, o cuando estaban bajo los efectos de las drogas, pero esta música además era significativamente más elevada que en el grupo control.

    Los resultados son una primera aproximación al uso terapéutico de la música en el tratamiento de la adicción aunque no tiene suficientes sujetos para poder concluir adecuadamente.
    Falta todavía realizar una investigación a respecto para poder comprobar si se producen mejoras o no el tipo de música que escucha.
    Igualmente el volumen de la misma que ha resultado significativamente diferente debe de ser explorado para comprender qué papel juega.

  • ¿Qué factores pueden motivar la adicción al ejercicio?

    ¿Qué factores pueden motivar la adicción al ejercicio?


    Uno de los riesgos que puede conllevar la asistencia habitual al gimnasio es cuando la motivación por la salud se convierte en adicción al ejercicio.

    La vigorexia

    La vigorexia o adicción al deporte es una situación más común de lo que se puede pensar y que afecta lo mismo a hombres y mujeres, por el cual la persona no puede dejar de practicar deporte, todos los días a cualquier hora.
    Como cualquier adicción conductual, esta puede surgir en cualquiera que practique deportes, pero donde las motivaciones que lo guían varían con el tiempo, dejando de ser algo sano para cuidarse o mantener en forma, a ser un comportamiento autoalimentado donde se produce una necesidad de practicar deporte por sí mismo.
    Como adicción que es, esto va a involucrar gran parte del tiempo de la persona con vigorexia, lo que puede también suponer un riesgo en el ámbito social y económico, pasando horas y horas en el gimnasio a diario, limitando así sus posibilidades de salir con alguien y de mantener una relación de pareja duradera, ya que se está más preocupada por el deporte que por otro asunto.
    Todo el mundo entiende de los beneficios para la salud de realizar algo de deporte diario, y que es importante mantener cierto nivel de regularidad en su práctica.
    Cuando alguien es un profesional el número de horas y la intensidad de los ejercicios se incrementa, sobre todo cuando se acerca alguna prueba o competición, reduciendo la intensidad el resto del año.
    Pero la vigorexia va más allá de la práctica del deporte para mantenerse sano o para ganar alguna competición, en esta adicción desaparece la finalidad última, para ser el propio deporte el fin, cada vez dedicando más tiempo, más esfuerzo, incluso cuando pone en riesgo la estabilidad de las relaciones sociales, familiares e incluso laborales de la persona que lo padece; pero no queda ahí la adicción, también ocupa buena parte del pensamiento, comprándose revistas especializadas, artículos deportivos y hablando con todos del mismo monotema, tanto que incluso llega a cansar.
    Quizás la situación más evidente de que se sufre esta adicción es precisamente cuando no se puede practicar deporte algún motivo, ya sea una lesión de la cual debe reposar o por trasladarse temporalmente a otro lugar, en esos momentos se sufre «el mono», es decir, esa intensa necesidad de practicar deporte sea como sea y donde sea, y si no afecta emocionalmente a la persona, pudiendo expresar su ansiedad que puede llevar a desesperación e incluso con mal humor, pero ¿Qué factores pueden motivar la adicción al ejercicio?


    Vídeo Recomendado: Obsesión por cuerpo musculoso e ingesta de vitaminas son señales de vigorexia- Andina

    Vigorexia y salud

    Esto es precisamente lo que se trata de investigar desde la Universidad de Mesina (Italia) publicado en el 2014 en la revista científica Journal of Addiction.
    El estudio se inició con 150 participaron deportistas amateurs, pero sólo lo completaron 120 de ellos, 69 hombres y 51 mujeres, que realizaban ejercicios en los gimnasios de la zona a los cuales se les administraron tres cuestionarios para rellenar, el primero sobre el riesgo de la persona de sufrir vigorexia a través del cuestionario estandarizado denominado Exercise Addiction Inventory (EAI), el segundo donde se evalúa el nivel narcisismo de la persona con el Narcissistic Personality Inventory (NPI) y el tercero donde se evalúa el nivel de autoestima del participante a través del Coopersmith Self-Esteem Inventory (SEI). Igualmente se recogieron datos socioademográficos, así como sobre la frecuencia de uso de las instalaciones deportivas.
    Los resultados indican que la mitad de los varones que participaron en el estudio estaban en riesgo a padecer vigorexia, mientras este porcentaje se elevaba a un 60% en el caso de las mujeres, evidenciando una mayor exposición de estas a la adicción al deporte.
    Se encontraron resultados significativos en cuanto a los días de asistencia a los gimnasios en función de la mayor o menor exposición a la vigorexia, a los niveles de narcisismo y a la autoestima.
    Donde a mayores niveles de exposición a vigorexia y mayores niveles de narcisismo se acompañan de una mayor asistencia y asiduidad a la práctica deportiva en gimnasios. Igualmente una baja autoestima se relaciona con un mayor asistencia a gimnasios.


    Vigorexia y emociones

    El estudio por tanto concluye que altos niveles de narcisismo y bajos de auotestima son los que están poniendo en riesgo a la persona a sufrir adicción al deporte, y lo que se refleja en un aumento del número de días de uso de las instalaciones deportivas.
    El estudio no contempla por que sería difícil de analizar el ejercicio que puede realizarse fuera de dichas instalaciones, y tampoco evalúa los pensamientos tan característicos de las personas que sufren adicción comportamental, claros exponentes de la vigorexia.
    Igualmente se relacionan las variables con el resultado de un cuestionario sobre sensibilidad a la vigorexia, pero no se realiza un seguimiento de los participantes para comprobar si efectivamente en un plazo razonable de unos meses o un año, la persona con baja autoestima, y con alto narcisismo acaba desarrollando la adicción al deporte, lo cual daría mucho más validez a los resultados.
    Igualmente la media de edad de los participantes con una media de 29 años, hace pensar que estos participantes pueden variar sus tendencias en función de otros factores no analizados como la posición social, el trabajo que desempeñan, la familia que tiene,… ya que todos ellos van a tener una u otra influencia en la persona, siendo esta influencia distinta a medida que la persona va madurando y adquiriendo nuevas responsabilidades.
    Aunque los resultados parecen claro en cuanto a la relación existente, hay que tener en cuenta que han sido obtenidos de una población relativamente pequeña, pero muy localizada en un país con una cultura e idiosincrasia propia como es la italiana, por lo que se precisa de nueva investigación para determinar si estos mismos resultados son extensibles a otras poblaciones.

Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario y ofrecer servicios personalizados. Al continuar navegando en este sitio, aceptas el uso de cookies. Puedes obtener más información y configurar tus preferencias en nuestra   Política del Sitio.

error: Content is protected !!