Ácido Gamma-Hidroxibutírico (GHB) – Características Detalladas
El Ácido gamma-hidroxibutírico (GHB) es un neurotransmisor y depresor del sistema nervioso central que también se usa en medicina para el tratamiento de trastornos como la narcolepsia. También ha sido mal utilizado como droga recreativa.
La fórmula química del GHB es C4H8O3. Es un ácido graso de cadena corta, estructuralmente relacionado con el neurotransmisor GABA, lo que explica su capacidad para afectar la actividad del sistema nervioso.
El GHB fue sintetizado por primera vez en 1960 por el químico Henri Laborit, quien lo investigó como posible anestésico. Posteriormente se descubrieron sus efectos depresores del sistema nervioso central y su potencial como droga recreativa.
El GHB se sintetiza en el cuerpo como un subproducto del metabolismo del neurotransmisor GABA, y se encuentra en pequeñas cantidades en el cerebro. También se produce sintéticamente para uso médico y recreativo.
El GHB es metabolizado en el hígado y el cerebro, convirtiéndose en succinato, que entra en el ciclo de Krebs para ser utilizado en la producción de energía. Su vida media es de 30 minutos a 1 hora.
El GHB actúa principalmente sobre los receptores GHB específicos y también interactúa con los receptores GABA-B, lo que contribuye a su efecto depresor sobre el sistema nervioso central.
El GHB se une a los receptores GHB y GABA-B, lo que provoca un aumento en la inhibición neuronal, reduciendo la actividad del sistema nervioso central. Esto causa efectos sedantes, hipnóticos y eufóricos en dosis bajas.
El GHB tiene efectos sedantes, hipnóticos, y ansiolíticos. A nivel terapéutico, se utiliza para tratar la narcolepsia y el trastorno por déficit de atención. También se ha estudiado su uso para reducir el consumo de alcohol en personas con dependencia.
El GHB se utiliza en el tratamiento de la narcolepsia para mejorar la calidad del sueño. También se investiga su uso en el tratamiento de la adicción al alcohol, ya que puede reducir los síntomas de abstinencia alcohólica.
En medicina, el GHB se utiliza bajo el nombre comercial de Xyrem para el tratamiento de la narcolepsia. Se prescribe para reducir la somnolencia diurna excesiva y la cataplejía (pérdida repentina del tono muscular) en personas con este trastorno.
El GHB reduce la actividad del sistema nervioso central al actuar sobre los receptores GABA-B, lo que provoca efectos sedantes, relajantes y eufóricos. También puede causar amnesia, confusión y pérdida del control muscular en dosis altas.
El GHB mejora la calidad del sueño al aumentar la cantidad de sueño profundo de ondas lentas (fase N3), que es crucial para la recuperación física y mental. Esto lo hace útil en el tratamiento de la narcolepsia.
El GHB es utilizado recreativamente debido a sus efectos eufóricos, relajantes y potenciadores de la sociabilidad. Sin embargo, su abuso puede llevar a sobredosis, coma y, en algunos casos, la muerte. Se ha asociado con el «uso de drogas para violación» debido a su capacidad para inducir inconsciencia.
El uso de GHB puede provocar efectos adversos sobre la salud mental, como confusión, ansiedad y depresión, especialmente cuando se abusa de él. En personas predispuestas, puede causar síntomas psicóticos o paranoia.
El GHB puede interactuar peligrosamente con otros depresores del sistema nervioso central, como el alcohol, las benzodiazepinas y los opioides, aumentando el riesgo de depresión respiratoria y sobredosis.
El GHB es conocido por sus fuertes efectos sedantes y relajantes musculares. En dosis terapéuticas, puede inducir un estado de somnolencia y relajación profunda, mientras que en dosis altas puede causar pérdida de la conciencia.
El GHB regula los niveles de dopamina en el cerebro. A dosis bajas, aumenta la liberación de dopamina, lo que produce efectos eufóricos. En dosis más altas, inhibe la liberación de dopamina, lo que contribuye a sus efectos sedantes.
El GHB influye en el metabolismo al reducir la frecuencia respiratoria y el consumo de oxígeno. También puede afectar la temperatura corporal, lo que provoca una ligera reducción de la temperatura interna.
El GHB tiene efectos analgésicos leves debido a su acción sobre los receptores GABA y su capacidad para deprimir la actividad neuronal. Esto puede reducir la percepción del dolor, aunque no se utiliza clínicamente con este fin.
El GHB ha mostrado tener efectos neuroprotectores en ciertos estudios, reduciendo el daño causado por la isquemia y protegiendo las células neuronales del estrés oxidativo. Esto lo convierte en un área de interés para la investigación en lesiones cerebrales.
El GHB tiene un alto potencial de sobredosis, especialmente cuando se mezcla con otras sustancias depresoras. Los síntomas incluyen confusión, vómitos, convulsiones, coma, y en casos graves, puede llevar a la muerte por depresión respiratoria.